El jefe del interbloque Argentina Federal en el Senado, Miguel Angel Pichetto, se reunirá hoy con ocho gobernadores para plantearles su propuesta alternativa en torno a los cambios en Bienes Personales.
La iniciativa que impulsa el senador peronista prevé que los inmuebles destinados a «casa-habitación» queden exceptuados del tributo hasta un valor de 18.000.000 de pesos, para evitar un impacto sobre buena parte de la clase media.
El proyecto para modificar el impuesto a los Bienes Personales podría recibir modificaciones en el Senado, por lo que si eso ocurre tendrá que volver a ser tratado por Diputados, Cámara que ya le dio media sanción.
Pichetto es crítico de la iniciativa que viene de Diputados, porque plantea un mínimo no imponible de 2.000.000 de pesos, por lo que -con la devaluación y las propiedades tasadas en dólares- la mayoría de los inmuebles del país deberían comenzar a tributar.
Si bien el impuesto se paga sobre el valor fiscal, el Gobierno de Cambiemos y los gobernadores avanzarán en 2019 con el revalúo inmobiliario para acercar esas valuaciones a los precios de mercado de las propiedades.
El encuentro se desarrollará desde las 11:00 en la Cámara alta, y participarán ocho mandatarios provinciales, entre ellos el cordobés Juan Schiaretti, el entrerriano Gustavo Bordet, el riojano Sergio Casas, la catamarqueña Lucía Corpacci y la fueguina Rosana Bertone.
Los gobernadores habían aceptado las modificaciones en Bienes Personales como parte de la compensación que recibirán las provincias por el traspaso de los subsidios al transporte y de la tarifa social eléctrica.
El proyecto aprobado en Diputados con 130 votos a favor, 38 en contra y ocho abstenciones, eleva el mínimo no imponible de este tributo de 1.050.000 pesos actuales a 2.000.000 a partir de 2019.
Así, aquellos que declaren bienes por entre $2.000.000 y $5.000.000 pagarán una tasa de 0,25%; de $5.000.000 a $10.000.000 tributarán 0,50%, y a partir de los $20.000.000, la tasa será de 0,75%.
Pero Pichetto evalúa proponer que los inmuebles destinados a «casa-habitación» queden exceptuados del tributo hasta un valor de alrededor de $18.000.000, para evitar un impacto sobre buena parte de la clase media.