La intensa lluvia, que se abatió con fuerza sobre la capital jujeña, causó inundaciones en zonas céntricas y barrios periféricos
Un diluvio sorprendió hoy a San Salvador de Jujuy y transformó a las calles en ríos, por lo que se generó un caos en la ciudad.
La intensa lluvia, que se abatió con fuerza sobre la capital jujeña, causó inundaciones en zonas céntricas y barrios periféricos.
Imágenes impactantes circularon en redes sociales, mostrando a vecinos luchando contra la corriente para cruzar las calles anegadas y a vehículos varados en medio de las inundaciones.
Un joven, desafiando la fuerza del agua, fue captado intentando cruzar un caudaloso arroyo formado en calle Argañaraz.
La Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales también sufrió las consecuencias de las precipitaciones, con aulas y pasillos inundados, lo que obligó a suspender las actividades académicas.
Los jujeños, acostumbrados a un clima más benigno, se vieron sorprendidos por este temporal que puso a prueba su capacidad de adaptación y resistencia.
La vida cotidiana de los jujeños se vio interrumpida este jueves por un fuerte temporal que azotó la ciudad. Las intensas lluvias provocaron inundaciones en diversas zonas, dificultando el tránsito vehicular y peatonal.
Calles convertidas en ríos, vehículos varados y negocios inundados fueron algunas de las postales de una jornada marcada por el agua.
Estudiantes, trabajadores y vecinos se vieron obligados a modificar sus rutinas debido a las complicaciones causadas por el temporal.
Las redes sociales se llenaron de imágenes y videos que daban cuenta de la magnitud del fenómeno meteorológico, generando preocupación entre la población.»
Un manto gris cubrió el cielo de San Salvador de Jujuy este jueves, dando paso a una intensa lluvia que se prolongó por varias horas.
Las precipitaciones, que comenzaron como una llovizna, se intensificaron rápidamente, transformándose en un verdadero diluvio que sorprendió a los habitantes de la ciudad.
La fuerza del agua desbordó los sistemas de drenaje, provocando inundaciones en diversas zonas. Calles, avenidas y plazas se convirtieron en ríos, dificultando el tránsito y generando caos en la ciudad.
Este fenómeno meteorológico, atípico para la época, puso de manifiesto la vulnerabilidad de la infraestructura urbana ante eventos climáticos extremos.