Ocurrió en Ezeiza y se distinguen por estar recubiertos con un polvo fluorescente. Además, no pican ni transmiten enfermedades
La Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), en colaboración con la municipalidad de Ezeiza, liberó 25.000 mosquitos machos estériles para el control ecológico del mosquito transmisor de enfermedades como el dengue, el zika y la fiebre chikungunya.
En qué consiste el proyecto contra el dengue
Para hablar sobre este tema, Canal E se comunicó con Marianela García Alba, bióloga y responsable de este proyecto, quien contó este procedimiento “se basa en la adaptación de la técnica del insecto estéril, que ha sido empleada con éxito en las regiones de Cuyo y Patagonia para el control de la mosca de los frutos”.
Según el entrevistado, esta metodología consiste en liberar un gran número de machos estériles, que compiten por copular con las hembras silvestres. Y agregó: “La copulación entre los machos estériles y las hembras silvestres resulta en una descendencia no viable, ya que el esperma transferido por los machos estériles no produce huevos fertilizados”.
En continuidad con el tema, la bióloga mencionó que como estos machos no pueden picar, tampoco tienen la capacidad de transmitir enfermedades y a través de liberaciones sucesivas de estos machos estériles, “buscamos disminuir la población de mosquitos, ya que los huevos que ponen las hembras no contendrán embriones viables, lo que interrumpe el ciclo reproductivo”.
Cuál es el porcentaje de efectividad y dónde se realizó la prueba
En cuanto a la efectividad de esta técnica, García Alba aseguró que radica en alcanzar un equilibrio en la tasa de esterilidad, que debe ser del 99%, “mientras garantizamos que los machos estériles sean altamente competitivos”. Y añadió: “Si una hembra se encuentra satisfecha tras su primera copulación, es probable que no busque a otro macho durante su vida, utilizando el mismo esperma para fertilizar todos sus huevos, logrando maximizar el impacto en la población de mosquitos al minimizar la reproducción”.
Al ser consultada sobre la primera liberación de machos estériles, la biólogo explicó que se llevó a cabo en el barrio Uno de Ezeiza, como parte de un ensayo denominado «marcado, liberación y recaptura«. En este estudio, “se liberó una pequeña cantidad de machos estériles para evaluar su dispersión en el entorno, la distancia que recorren y su competitividad con los machos silvestres”, siguió.
Para terminar, García Alba dijo: “Con los datos obtenidos de esta investigación, planeamos diseñar futuras liberaciones a partir de fines de noviembre, con el objetivo de optimizar el control de la población de mosquitos en la región”.