El 97,50% de estos delitos tiene lugar en la vía pública. Los datos pertenecen a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y al partido bonaerense de la Matanza
La inseguridad es un problema creciente que afecta a personas de todas las edades y condiciones sociales. Este fenómeno genera miedo y ansiedad, impactando en la calidad de vida de las comunidades. Incluso, la sensación de vulnerabilidad constante obliga a los ciudadanos a modificar sus rutinas y tomar medidas adicionales para protegerse, lo que evidencia la gravedad de la situación.
Un ejemplo palpable es el robo de autos, un delito que ha mostrado un preocupante incremento en los últimos años. Este tipo de crimen no solo representa una pérdida económica considerable para las víctimas en algunas ocasiones, sino que también puede generar un profundo sentimiento de impotencia en quienes deben afrontar las consecuencias.
En Buenos Aires, el alza en los robos de autos es alarmante. Y es que según el último “Indicador Ituran de Robo Vehicular” (IRV), estos hechos delictivos aumentaron un 41%. Este informe, elaborado por Ituran Argentina, especializada en administración y recuperación de vehículos, mostró que la mayoría de los robos en mayo ocurrieron en la vía pública, tanto en la Ciudad de Buenos Aires (CABA) como en el Gran Buenos Aires (GBA).
La modalidad predominante fue el robo a mano armada, que representó el 64,80% de los casos, mientras que el hurto sin violencia constituyó el 35,20%. En tanto, los autos particulares fueron los más afectados con el 59,84% de los vehículos robados, seguidos por las pick ups, utilitarios, camiones y motos. Cabe destacar que casi la mitad de estos incidentes fueron perpetrados por grupos de tres a cuatro delincuentes, lo que representa un 50% del total registrado.
En este contexto, Daniela Medina, gerente del Centro de Comando y Control de Ituran Argentina, hizo énfasis en el aumento que han tenido los robos bajo la modalidad de hurto. “Históricamente, el 70% de los robos se cometían a mano armada y el 30% eran hurtos. Actualmente, estas cifras han cambiado ligeramente”, sostuvo.
De acuerdo al reporte, los garajes fueron el escenario solo del 6,25% de los hurtos, aunque un abrumador 93,75% ocurrió en la vía pública. En cuanto a los robos a mano armada, el 97,50% tuvo lugar en la vía pública. Los días de mayor incidencia fueron los miércoles (21,26%), seguidos de los viernes (18,11%) y los lunes (15,75%). En contraste, los domingos registran la menor cantidad (7,09%), reflejando la misma tendencia observada el mes anterior.
En términos geográficos, el partido de La Matanza destaca como la zona con mayor delitos de este tipo, concentrando un 31,40% de los robos. Esta cifra refleja un aumento significativo del 23% en la Zona Oeste, que alcanza un 52% respecto al mes anterior. Por su lado, Zona Sur sigue con un 32% y la Capital Federal con un 12,80% de los casos reportados.
En cuanto a los horarios más vulnerables, el informe del IRV confirmó que la noche es el periodo más riesgoso, con un 45,67% de los robos ocurriendo entre las 18 y las 24. Le sigue la tarde, de 12 a 18, con un 26,77%, mientras que las franjas de 6 a 12 y de 0 a 6 registran el 14,17% y 13,39% respectivamente.
“El incremento se da en zonas como Capital Federal y La Matanza, y el objetivo son unidades que tienen más de 10 años en el mercado, que son seleccionados específicamente para autopartes por falta de repuestos por año de fabricación”, señaló Medina, quien agregó que el aumento sostenido de delitos no sólo se da año a año sino también mes a mes. “Esto refleja claramente la necesidad de tomar medidas de prevención eficientes para que los dueños de vehículos se ahorren el disgusto que este tipo de situaciones provocan”, agregó.
En esa misma línea, durante el reciente encuentro del 7° Seminario Latinoamericano de la Asociación Internacional de Investigadores del Robo de Autos (IAATI), celebrado en el Instituto Universitario de la Policía Federal Argentina el mes pasado, se presentaron datos actualizados del tema, entre ellos el alza del 14% en los casos de robo de vehículos en Argentina durante el primer trimestre de 2024 en comparación con el mismo período del año anterior. Esta tendencia ha generado preocupación significativa entre consumidores, empresas de transporte y logística, así como en compañías de seguros de autos, debido a sus efectos directos en pérdidas económicas.
Adicionalmente, en 2023, las motocicletas experimentaron un aumento en la proporción de robos, alcanzando una participación del 37%, según datos recientes de CESVI. Esta suba contrasta con la tendencia observada en otros tipos de vehículos, evidenciando un crecimiento interanual notablemente superior en la categoría de motos. Marcelo Aiello, gerente general de CESVI, subrayó la urgencia de fortalecer las medidas de seguridad y prevención, instando a una colaboración más estrecha entre sectores público y privado para proteger a los propietarios de vehículos y mitigar las tasas de criminalidad.
De hecho, un análisis realizado por el Centro de Opinión Pública de la Universidad de Belgrano reveló que casi el 70% de los encuestados percibe la inseguridad como un problema grave en la actualidad. Además, más del 60% de los participantes indicaron haber modificado sus rutinas diarias para mitigar los riesgos asociados con la inseguridad en el último año.
No obstante, los informes de CESVI destacan una desaceleración en los robos parciales, como los casos de robos de ruedas, aunque esto no implica una reducción absoluta de incidentes. Aiello indicó que, tras un aumento durante los primeros años de la pandemia, se ha observado una marcada desaceleración en el crecimiento de estos robos durante 2023 y el primer trimestre de 2024.
Contrabando en la frontera
En el seminario de la Asociación Internacional de Investigación de Robo de Automotores también se informó sobre el destino de los autos robados en el área metropolitana de Buenos Aires: muchos de estos son trasladados a la frontera entre Misiones, Brasil y Paraguay, donde se utilizan principalmente para actividades delictivas como el tráfico de drogas y el contrabando de cigarrillos.
En este sentido, el comisario general Luis D’Achary, director de Verificación de Automotores de la Policía de Misiones, explicó que los vehículos tipo utilitarios y camionetas son los más comunes en estos delitos, debido a su mayor capacidad de transporte de mercancías ilegales. Igualmente, aseguró que el robo de automóviles en Argentina ha dejado de ser un hecho perpetrado por individuos aislados y se ha convertido en una operación sofisticada dirigida por mafias organizadas.
Por ejemplo, según D’Achary, en las zonas fronterizas de Misiones estos autos robados se utilizan para ejecutar diversas actividades ilícitas complejas, desde la trata de personas hasta el tráfico de mercancías ilegales, siendo solo el primer paso de una trama delictiva mucho más amplia que se extiende a través de la frontera.
Del mismo modo, Carlos Masckinlay, representante de empresas de seguros y seguridad, manifestó que las bandas delictivas han aumentado en número y sofisticación, operando no solo a nivel municipal sino también regional e internacional, con conexiones en varios países.
Ante esto, aseguró que se ha llevado a una creciente demanda de soluciones de seguridad integradas, que busquen minimizar las vulnerabilidades en el rastreo y recuperación de vehículos robados, ya que tanto los usuarios finales como las empresas requieren cada vez más sistemas de seguridad avanzados para protegerse contra estas amenazas y asegurar la integridad de sus activos.