La empresa estatal incrementó un 450% su tarifa, algo que fue criticado por referentes opositores. Cuál es la propuesta del Palacio Vasallo
El fuerte aumento en las tarifas de Aguas Santafesinas, que acumula una suba del 450% en lo que va del año, sigue generando preocupación y críticas entre los rosarinos. Mientras el Concejo Municipal propone un cambio en el sistema de facturación para que los usuarios paguen únicamente por el agua que consumen, voces políticas de la oposición se suman a las críticas por el incremento y hablan de un «excesivo» aumento.
Cambios desde el Concejo Municipal
El concejal Fabrizio Fiatti, de Arriba Rosario, presentó un proyecto para que Aguas Santafesinas implemente un plan de macro medición de agua en la ciudad. Actualmente, el sistema de facturación se basa en la superficie de la propiedad, no en el consumo real de agua. Fiatti destacó «la necesidad de buscar herramientas para racionalizar el consumo de agua y establecer criterios de justicia económica».
En 2018, solo el 27% de los domicilios en Rosario contaban con medidores de agua. Fiatti sugiere que «la instalación de medidores reduciría significativamente el consumo de agua, que actualmente es mucho mayor en las propiedades sin medición». El proyecto también incluye propuestas para modificar el reglamento de edificación para que la instalación de medidores sea obligatoria en nuevas construcciones.
Respuesta de Aguas Santafesinas
Anahí Rodríguez, presidenta de Aguas Santafesinas, explicó que «el régimen tarifario vigente data de 1995, con la privatización de la empresa». Este sistema no fomenta la micromedición y cobra a los usuarios en base a metros cuadrados de propiedad, no por el consumo real.
Rodríguez subrayó que es «crucial modificar el régimen tarifario y regularizar el sistema de grandes acueductos, un tema que el gobernador Maximiliano Pullaro ya ha enviado a la Legislatura para su debate». La empresa está avanzando en la instalación de micromedidores, y Rodríguez enfatizó que «esto permitirá a los usuarios recibir facturas basadas en su consumo real de agua».
Aumento tarifario y plan de obras
El Gobierno provincial aprobó una serie de aumentos desde enero, acumulando un 450% en lo que va del año. La inflación acumulada desde diciembre de 2023 hasta mayo de 2024 es del 115,6%. Se esperan más ajustes tarifarios en el segundo semestre del año.
En paralelo, la ampliación del Acueducto del Gran Rosario, crucial para mejorar la distribución de agua en la ciudad, está en marcha. El Gobierno provincial ha tomado las riendas de esta obra, con planes de comenzar trabajos importantes en julio, como la cascada del Saladillo y la avenida Jorge Newbery.
Conclusión
El aumento tarifario de Aguas Santafesinas ha generado un amplio debate en Rosario. La propuesta del Concejo de cambiar el sistema de facturación a uno basado en el consumo real de agua busca una mayor equidad y eficiencia en el uso de este recurso esencial. Mientras tanto, la empresa y el gobierno provincial trabajan en la instalación de medidores y la ampliación de infraestructuras críticas para garantizar un mejor servicio a los usuarios.
“Un 450 por ciento de aumento es excesivo”
Oscar Urruty, ex integrante del Enress (Ente Regulador de Servicios Sanitarios), expresó su preocupación por el reciente aumento tarifario de Aguas Santafesinas, calificándolo de «excesivo» y señalando que «todos los consumidores están pagando por las pérdidas del sistema». Aguas Santafesinas ha implementado un aumento en las tarifas que supera el 400 por ciento en los últimos meses.
La presidenta de Aguas Santafesinas, Anahí Rodríguez, defendió el incremento al afirmar que se trata de un sinceramiento necesario para equilibrar las cuentas de la empresa. Sin embargo, Urruty cuestionó esta medida y subrayó su impacto en los usuarios.
«Se quiere llevar la ecuación a cero: que todo lo que se gasta lo paguen los usuarios, lo cual es injusto. Un 450 por ciento de aumento es excesivo, no se condice con la posibilidad del bolsillo de los usuarios», afirmó Urruty.
Además, Urruty destacó que «el Estado debería asumir los costos de las pérdidas de agua debido a fallas en la infraestructura y el consumo en asentamientos irregulares», que representan el 40 por ciento del agua potabilizada. «El Estado debería hacerse cargo, no pagar los usuarios, que deben pagar por lo que consumen, no por el agua que se pierde en las fallas de la infraestructura y lo que se consume en asentamientos irregulares», señaló.
En su evaluación, Urruty recordó que desde 2006 el Estado provincial ha realizado aportes y resaltó la existencia de ineficiencias en la gestión de Aguas Santafesinas. «Veíamos una serie de ineficiencias en las gestiones. En la ciudad vemos corralitos y pozos, pérdidas. Sabemos que hay una gran cantidad de agua que se consume en los asentamientos irregulares», concluyó.