El presidente de San Lorenzo, Matías Lammens, admitió hoy su «molestia» por la presencia del presidente de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), Claudio Tapia, en el cumpleaños de Carlos Tevez horas después del polémico arbitraje de Silvio Trucco en el empate ante Boca Juniors (1-1).
«Me generó molestia ver que el presidente de AFA estaba a la noche festejando el cumpleaños de uno de los jugadores de Boca. Más allá de la amistad, cuando uno tiene una responsabilidad dirigencial tiene que tomar esas cosas con mucho cuidado», manifestó Lammens en una entrevista con TyC Sports.
Lammens contó que intercambió mensajes con «Chiqui» Tapia luego del partido y le presentó su enojo por el arbitraje de Trucco en el empate 1-1 en el Nuevo Gasómetro pero reconoció que le generó «molestia» verlo a la noche en el cumpleaños de Tevez.
El titular del «Ciclón» insistió en el descontento y en la «preocupación» por los arbitrajes pero prefirió «no pensar» ni «abonar» la «teoría del complot» contra San Lorenzo.
«No quiero pensar ni abonar la teoría del complot pero también me siento desilusionado cuando pasan este tipo de cosas», expresó Lammens, más temprano en diálogo con radio La Red.
«No quiero hablar en caliente porque puedo cometer errores pero sí quiero manifestar públicamente que estoy muy preocupado por los últimos dos arbitrajes», insistió Lammens, haciendo referencia al anterior partido ante Talleres de Córdoba, que el equipo de Claudio Biaggio también terminó con nueve jugadores.
Para el presidente de San Lorenzo, escolta de Boca a seis puntos, el árbitro Trucco cometió «errores groseros» que perjudicaron a su equipo.
El mandamás mencionó una inexistente falta de Gabriel Gudiño sobre Emmanuel Mas con San Lorenzo en ataque y la expulsión de Gabriel Rojas como las decisiones más difíciles de comprender.
«La jugada del gol de Tevez es offside. Fue determinante. Y también pudo haber sido expulsado el lateral izquierdo de Boca (Frank Fabra) y por eso salió en el entretiempo», agregó.
«Cuando pasan estas injusticias, duele mucho», reconoció Lammens, visiblemente enojado por lo sucedido el domingo por la tarde en el Nuevo Gasómetro.
Lammens, quien preside a San Lorenzo desde fines de 2016, confesó que ocurre esto «dan ganas de dejar» la dirigencia pero prefirió «recargar energías y seguir».
«Los dirigentes tomamos decisiones que no son populares y hacemos mucho esfuerzo por eso cuando pasan estas cosas uno se siente desilusionado», reveló.
El mandatario de San Lorenzo, por otro lado, también expresó su enojo por el «accionar de la policía» en la previa del encuentro cuando mientras custodiaba el micro del plantel de Boca tiró gas pimienta a simpatizantes del «Ciclón».
«Lo único que logran con lo que le hicieron al micro de hinchas es que alejen a la gente de las canchas. Hubo un muy mal accionar de la policía», afirmó.
A su vez, consultado por los insultos que recibió Julio Buffarini, campeón con San Lorenzo de la Copa Libertadores de América y actualmente jugador de Boca, pidió «dar vuelta la página» y quedarse con el recuerdo de lo que hizo mientras estuvo en el club.