Durante 2023, la economía de Rosario había mostrado una sola baja interanual en noviembre (-0,5%)
La recesión se profundiza y golpea fuertemente a Rosario, con una caída de la actividad económica del 20,4% en marzo. Esta es la mayor disminución desde los peores momentos de la pandemia. Todos los sectores monitoreados por el Centro de Información Económica de la Municipalidad terminaron en números rojos.
El centro mide la actividad en la ciudad a través del indicador mensual de facturación, que ajusta por inflación los valores que facturan los locales de distintos rubros que pagan el Derecho de Registro e Inspección (Drei). Las cifras de marzo son alarmantes. Comparativamente, el Estimador Mensual de Actividad Económica (Emae) del Indec reportó una caída interanual de la economía nacional del 8,4%.
En febrero, la actividad había disminuido un 3% y en enero un 5,4%, ya marcando una tendencia negativa. En diciembre, el indicador había mostrado un crecimiento del 1,5%.
Durante 2023, la economía de Rosario había mostrado una sola baja interanual en noviembre (-0,5%), a pesar del impacto de la sequía en la economía provincial. El resto del año había registrado incrementos en la facturación. Sin embargo, en el primer trimestre de 2024, la actividad disminuyó un 10,1% respecto al mismo periodo del año anterior, con una caída del 9,7% entre febrero y marzo.
En marzo, todos los sectores mostraron caídas: la industria manufacturera un 33,9%, la construcción un 38,9%, los servicios privados un 7,8%, y el comercio un 21,3%. La manufactura se vio afectada por la disminución en la producción de metales y maquinaria (-42,7%), textiles y cuero (-39,9%), componentes electrónicos y equipos eléctricos (-38,2%), y vehículos y equipos de transporte (-36,9%). También hubo bajas en minerales no metálicos (-28%), alimentos y bebidas (-19,1%), y productos químicos y plásticos (-18,8%).
El comercio sufrió una caída en la venta, mantenimiento y reparación de vehículos del 33,6%, el comercio al por mayor del 21,4% y al por menor del 17,3%. Los servicios privados, con una baja del 7,8%, registraron disminuciones en la actividad hotelera y de comida (-38,9%), servicios inmobiliarios y empresariales (-18,6%), transporte y comunicaciones (-16,4%), y servicios comunitarios (-10%). Solo la intermediación financiera y servicios de seguros mostraron un alza del 4,2%.
Esta información proviene de la facturación a valores corrientes, basada en las declaraciones juradas presentadas mensualmente por los contribuyentes del Régimen General del Drei. Los últimos seis meses de la serie se consideran provisorios, por lo que puede haber cambios en algunos indicadores.
La economía rosarina ha pasado de liderar en densidad industrial a enfrentar un aumento en el desempleo y la caída de empresas, impulsada por cambios en la política económica nacional, apoyada en algunos casos por referentes locales.
La Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Rosario denunció la pérdida de más de mil empleos registrados en el sector metalúrgico desde principios de año. Antonio Donello, secretario general del gremio a nivel local, expresó su preocupación por esta inédita y rápida caída de puestos de trabajo. La demanda en la fabricación de heladeras y equipos de refrigeración, un sector emblemático de Rosario, cayó más del 40%, provocando ajustes en las principales plantas de hasta un 20% en su plantilla de empleados.
La industria del calzado también reportó caídas en las ventas entre un 40% y un 70%, afectando principalmente a las fábricas ubicadas en las zonas vecinas a Rosario. La pérdida de empleo en este sector alcanza el 20%.
La producción industrial de Santa Fe se desplomó en marzo un 18,8% interanual, acumulando una contracción del 14,6% en el primer trimestre, según la Federación de Industriales de Santa Fe (Fisfe). El informe subraya que el 89% de las ramas manufactureras experimentaron una disminución respecto al mismo mes del año anterior.