El entrenador de Rosario Central se lamentó por el rendimiento mostrado en el complemento del partido ante Deportivo Riestra
El semblante de Miguel Russo durante la conferencia de prensa no era el mejor. Aunque el entrenador de Rosario Central suele ser reservado en sus declaraciones posteriores a los partidos y sus respuestas son más diplomáticas, siempre ha sido un técnico acostumbrado a ganar, por lo que solo obtener un punto frente a Riestra, con un jugador de más durante casi todo el partido y ante su público, no es algo que le resulte satisfactorio.
“En la primera mitad encontré muchas cosas positivas, ya que fuimos en busca del triunfo con calma y jugando por abajo. Sin embargo, en la segunda parte nos desordenamos, tiramos muchos centros sin la debida tranquilidad. En líneas generales, el equipo respondió bien. Buscamos el gol, tuvimos oportunidades, pero debemos seguir trabajando y mejorando. La idea era jugar por abajo y así anotamos el gol. Los equipos que se repliegan constantemente esperan que les mandemos centros, y ahí fue donde cometimos errores. El primer gol nos sorprendió, ellos retrocedieron bien y se replegaron después de la expulsión, lo cual es un mérito de Riestra. Las ganas de ganar siempre están. Veníamos de hacer tres buenos partidos ante Peñarol, River y Mineiro, y en este partido el segundo tiempo se nos complicó”, explicó Russo.
En relación a si le inquieta la falta de gol de sus delanteros y si le beneficia que Fabricio Oviedo haya marcado tres goles en reserva, el DT de Central comentó: “No podemos comparar. Oviedo jugó en reserva. Si tengo que poner a un chico de la 9ª que hizo un gol, sería un problema. Hay que evaluar los tiempos y las formas. Logramos cosas importantes con Cervera y Martínez Dupuy, como salir campeones, y tras la partida de Alejo Veliz, ellos sostuvieron el semestre anterior. Módica y Oviedo deben seguir creciendo, son muy jóvenes”.
Russo fue consultado sobre si la posible influencia de la Copa Libertadores afecta el rendimiento de los jugadores en estos partidos, a lo que respondió: “Hablamos mucho con los futbolistas. En definitiva, no podemos proteger a tantos jugadores. Debemos jugar y contamos con seis días para el próximo partido. Algunos jugadores, como Giaccone, deben cuidarse, pero otros necesitan ritmo. Debemos ir adaptándonos. Al disputar dos competencias simultáneas, la mente debe concentrarse en el partido en curso cuando el árbitro da inicio al juego”.