El ministro del Interior tiene intenciones de desactivar la medida de fuerza de la central
El ministro del Interior, Guillermo Francos, mantiene la esperanza de poder desactivar el paro nacional convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT) previsto para el 9 de mayo y admitió que el llamado a salir a las calles, que tuvo lugar tras la reunión de los gremios con el Gobierno, lo tomó por sorpresa.
“Decretar la convocatoria a un paro el día después de una reunión muy buena sorprendió, pero está dentro de las decisiones que puede tomar la CGT que venían conversando, y que tienen distintas posiciones”, sostuvo en declaraciones radiales.
En la misma línea, puntualizó: “Está previsto de acá a un mes, así que seguiremos conversando, no tenemos por qué parar las conversaciones por esto”.
Consultado por el intercambio con los gremios que protagonizó junto al jefe de Gabinete, Nicolás Posse, el pasado miércoles en Casa Rosada, desarrolló: “Fue muy buena la reunión, las partes plantearon sus posiciones, el sector gremial defiende intereses de los trabajadores y el gobierno intereses en general, por eso miramos el equilibrio de la situación económica, en un momento complejo, y se preocupan fundamentalmente por la situación de los trabajadores, como es su tarea. Siempre la dificultad es encontrar el punto de equilibrio”.
“Hubo entendimiento de parte del sector gremial y también entendimientos de parte del Gobierno de los reclamos”, afirmó, y agregó: “Seguiremos conversando. De acá hasta mayo tenemos mucho tiempo para seguir conversando así que veremos, tenemos que analizas y conversaremos los motivos centrales por los que convocan a un paro”.
Francos mantiene la intención de no homologar la paritaria de Camioneros del 45% para marzo y abril, que se ubica por encima de la inflación, y planteó que el pedido se enmarca en la “situación de emergencia económica, por esta continuidad inflacionaria que ha habido en los últimos años, y este intento del Gobierno de ponerle fin haciendo esfuerzos enormes con el déficit cero, equilibrando las cuentas públicas”.
En otro pasaje de la entrevista, el ministro aceptó la movilización prevista para el 1° de mayo, pero la diferenció de la medida de fuerza. “No veo mal que los trabajadores efectúen su reclamo, es el 1° de mayo y es lógico (que movilicen). Otra cosa es un paro nacional, también tendrán que pensar si la convocatoria al paro va a tener el acatamiento que ellos buscan o va a ser como el anterior”, puntualizó.
“No creo que paren por uno solo de los gremios. Será que ellos tienen sus propios conflictos internos, lamento que no nos dijeran que tenían esta situación para analizar, porque después de la buena reunión no estuvo latente el tema”, concluyó el funcionario.