El Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) había solicitado la apertura del mercado israelí a la carne con hueso kosher
La Argentina comenzará a exportar carne bovina y ovina con «hueso kosher» a Israel, según anticipó el Gobierno de ese país.
Hasta ahora, Israel compra cortes congelados y enfriados sin hueso del cuarto delantero, pero decidió autorizar la adquisición de otro tipo de carnes, pocos días después de la visita del presidente Javier Milei a ese país.
Uno de los directores del Servicio Veterinario y de Salud Animal de Israel, Shlomo Garazi, destacó que su país «ha
considerado a Argentina como país elegible para exportar carne con hueso desde todo el territorio nacional».
También consideró necesario ampliar el alcance del Certificado Veterinario Internacional (CVI) para el envío de carnes
deshuesadas y menudencias para sumar la carne bovina con hueso kosher.
Durante el mes pasado, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) había solicitado la apertura del mercado israelí a la carne con hueso kosher, «fundamentado en el interés del sector productivo argentino y en la confianza en términos higiénico-sanitarios que nuestro país ya otorga a los envíos de carne bovina sin hueso a ese mercado».
«La Argentina posee el reconocimiento de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) como libre de fiebre aftosa, con dos zonas libres con vacunación y tres sin vacunación. Este estatus sanitario, que se mantiene desde 2006, es reconfirmado anualmente para nuestro país, lo que genera confianza en sus compradores», resaltó el organismo.
Y añadió que «los resultados de vigilancia epidemiológica, con la aplicación de muestreos serológicos y atención de denuncias y sospechas, demuestra que se mantiene la condición sanitaria de libre de la enfermedad en las distintas zonas del país».
De acuerdo con datos del Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (Ipcva), Israel compró carne bovina argentina por 36.264,9 toneladas en 2023, un 16,6% más que el año anterior. Así, ese país fue el segundo comprador en volumen después de China, y el tercero en dinero.