El Gobierno avanzó con una rebaja del 9% al 0,3% de la recaudación del Impuesto PAÍS destinada a ese fondo
Los curas villeros emitieron hoy un fuerte comunicado contra la decisión del Gobierno nacional de recortar los fondos del Fondo de Inversión Social Urbano (FISU), que administran organizaciones sociales en barrios populares.
El texto, titulado «No al recorte en políticas públicas en villas, asentamientos y barrios populares», fue firmado por un grupo de más de 50 sacerdotes que se desempeñan en esos lugares. Advirtieron que esta medida significa «un retroceso que genera mayor exclusión y, por lo tanto, inseguridad y desintegración social».
En el texto destacaron las políticas públicas que en los últimos años permitieron que «muchos vecinos pudieran lograr mejor acceso a cloacas, agua, luz, escuela, salita y centros comunitarios», mientras que «otros pudieron ampliar y mejorar sus humildes casas«.
«No es bueno desenchufar el Estado de las villas y asentamientos. Es un golpe muy duro bajar este financiamiento que beneficia a más de 5 millones de vecinos, entre los cuales la mayoría son menores», afirmaron.
Luego advirtieron que «la intervención del Estado en los más de 5000 barrios populares de todo el país no puede decaer. Bajar el presupuesto de la FISU (Fondo de Integración Socio-Urbana) sería volver para atrás».
«No podemos tolerar semejante retroceso que genera mayor exclusión y, por lo tanto, inseguridad y desintegración social. Prácticamente es la única política pública que apunta al núcleo duro de la pobreza», insistieron.
En ese marco, le pidieron al Gobierno que «se revise lo que haga falta para que la Integración Socio-Urbana sea una realidad cada vez más efectiva».
El Gobierno de Javier Milei avanzó este lunes con un recorte del 9% al 0,3% de recaudación del Impuesto PAÍS destinado al Fondo de Integración Socio Urbana (FISU), dirigido al financiamiento de proyectos de barrios populares y la creación de lotes con servicios.
Lo hizo a través del Decreto 193/2024, publicado en el Boletín Oficial. En los últimos días, el Gobierno planteó la revisión de los fondos fiduciarios.