El entrenador de la Selección argentina Sub-23 reiteró la invitación para Lionel Messi y Ángel Di María de cara a los Juegos Olímpicos
El entrenador de la Selección argentina Sub-23, Javier Mascherano, se defendió hoy de las críticas luego de la clasificación a los Juegos Olímpicos de Paris y, aunque remarcó que no le gusta que lo «agredan todo el tiempo», sostuvo que no puede «cambiar la visión que la gente pueda tener» sobre él.
«No me gusta que me estén agrediendo todo el tiempo, creo no hacerle nada a nadie. Pero yo no puedo cambiar la visión que pueda tener la gente sobre mí. Nunca me comporté mal con nadie», expresó Mascherano en declaraciones a D Sports Radio, horas después del triunfo ante Brasil que le dio a Argentina uno de los dos boletos a los JJ.OO.
Y añadió sobre el certamen: «Estos torneos son muy demandantes, nuestras familias se quedan en nuestras casas. Teníamos que concentrarnos y poner toda la energía acá».
«Uno va aprendiendo todos los días, entendiendo qué es lo que necesita el equipo en cada partido. Tenemos grandes jugadores en nuestra Selección, sabía que este equipo iba a salir adelante. Nunca tuve ninguna duda, habíamos sido superiores a todos los rivales. Durante todo el campeonato estuve muy tranquilo. El partido con Paraguay fue un quiebre importante», continuó el ex mediocampista central.
Por otra parte, Mascherano ratificó la invitación para el astro Lionel Messi y para Ángel Di María, quienes desea que sean dos de los tres mayores con los que podrá contar el plantel en Paris.
«Iremos viendo qué sucede, tenemos varios partidos amistosos en el medio. Ellos saben que tienen las puertas abiertas», insistió el «Jefecito».