Policiales

Diez años de cárcel a un preso que desde la cárcel «tercerizaba servicios» ilícitos en Rosario


Mauro Vergara fue considerado jefe de una organización dedicada a la ejecución de diversos delitos

Un preso que “tercerizaba servicios” ilícitos desde la cárcel fue condenado hoy en Rosario a 10 años de prisión por los delitos de amenazas, extorsiones y como jefe de una asociación ilícita, informaron fuentes judiciales.

La condena quedó confirmada al ser homologado por la jueza penal Verónica Lamas González en el marco de un juicio abreviado en el cual el acusado, identificado como Mauro Vergara (32), aceptó los cargos imputados por el fiscal Pablo Socca, informó el Ministerio Público de la Acusación (MPA).

Como cumplía una condena anterior a 10 años y 11 meses de prisión, la Justicia unificó la pena de Vergara en 20 años, añadieron los informantes.

El fiscal le atribuyó a Vergara ser jefe de una organización dedicada a la ejecución de diversos delitos “y/o a la provisión de servicios a terceros para su realización”.

Por su parte, Vergara cumple una condena en la Unidad Penitenciaria 11 de la provincia de Santa Fe y los nuevos hechos por los que fue condenado los cometió en prisión.

Socca acusó a Vergara por los delitos de extorsión –consumada y en grado de tentativa-; balaceras a puntos de ventas de estupefacientes rivales “para ocuparlos o para cobrar deudas”; usurpaciones de viviendas para instalar búnkeres de comercio de drogas; tráfico de estupefacientes; robos de vehículos, compra venta de armas de origen ilícito.

De acuerdo a la investigación que derivó en el juicio abreviado, Vergara conducía una banda integrada por menores de edad –aunque no únicamente- en los barrios Tablada y República de la Sexta, al sur de Rosario.

Allí “vendían estupefacientes y mantenían enfrentamientos con bandas rivales a fin de prevalecer en el territorio”.

Pero el grupo no solo gerenciaba su propio negocio narcocriminal, sino que proveía servicios ilícitos “para diferentes personas que convenían con la banda su realización”.

Entre otros hechos, el fiscal le atribuyó al condenado haber concurrido con otras personas de su organización a amenazar a una denunciante domiciliada en barrio Tablada.

El 29 de marzo de 2021 le envió mensajes al teléfono celular de la víctima por medio de los cuales le ofrecía vender estupefacientes indicándole: “O es por las buenas, o es por las malas.»

La persona amenazada rechazó la propuesta y dejó su vivienda, a la que regresó el 1 de abril de ese año, día en que le dejaron una nota intimándola a que abandone su casa, según la investigación.

Las escuchas telefónicas del caso permitieron, a su vez, determinar que los mensajes amenazantes vía la aplicación WhatsApp fueron realizados desde un teléfono móvil que el preso utilizaba en el pabellón 7 de la cárcel santafesina de Piñero.

También fue acusado de ordenar el ataque a tiros al domicilio de la familia de un chico de 15 años, al que le reclamaba una deuda por drogas.

El adolescente finalmente fue asesinado luego de esa balacera, cuando la familia había dejado el domicilio y él permaneció cuidándolo, consignaron fuentes que aclararon que ese homicidio se investiga en un legajo aparte.

Por último, Vergara también fue acusado de extorsión por pedirle 700.000 pesos a un grupo familiar al que antes había intimidado con mensajes.