El operativo lo llevó adelante la Policía de la Ciudad de Buenos Aires en la zona de los Tribunales
El Gobierno de la Ciudad realizó esta mañana un operativo de desalojo a los integrantes del Tercer Malón de la Paz que iban a levantar hoy el acampe que mantienen hace cuatro meses en la Plaza Lavalle, frente a los Tribunales, en rechazo a la reforma constitucional de Jujuy que fue impulsada por el exgobernador de esa provincia, Gerardo Morales.
«En la Ciudad asumimos un compromiso con los vecinos: ordenar el espacio público para que puedan volver a disfrutarlo. No da lo mismo avasallar los derechos de otros que apostar a una convivencia respetuosa. Vamos a seguir por este camino del orden», sostuvo el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, en un comunicado de prensa difundido esta mañana.
Según se explicó en el comunicado, el gobierno porteño «desalojó esta mañana pacíficamente la ‘ranchada’ ubicada en la Plaza Lavalle donde decenas de personas ocupaban ilegalmente el espacio público» desde hace cuatro meses.
En tanto, integrantes del Tercer Malón informaron a Télam que el desalojo se produjo a las 6 de la mañana por parte de efectivos de la Policía porteña, justo en la jornada que habían anunciado iban a levantar el acampe para volver a la provincia de Jujuy.
«Vinieron a demostrar que nos echaban, pero ya estaba definido que nos íbamos hoy. Vinieron para presionar. Entró la Infantería a tomar posesión de la plaza y nos dijeron que no podíamos estar ahí», explicó a Télam el integrante del Tercer Malón, Desiderio Olmos.
El grupo se encuentra aún en la Plaza Lavalle aguardando el micro que ya tenían contratado para volver a Jujuy.
«Retornamos a Jujuy porque necesitamos volver a nuestras casas en un contexto donde esa reforma se sigue legitimando por lo cual insistimos en que se declare su nulidad», agregó Olmos.
Un informe de la Comisión de Análisis sobre Violación de los Derechos Humanos en Jujuy, que fue creada para recopilar denuncias sobre los casos de violencia institucional que se sucedieron en la provincia durante las protestas que se originaron a raíz de la promulgación de la Constitución, fue «lapidario en materia de criminalización de la protesta y muestra la ilegalidad de la reforma» que impulsó Morales.
En tanto, desde el Gobierno porteño, advirtieron que la protesta se transformó en «un asentamiento precario» que «generaba malestar a los vecinos y transeúntes».
«Luego, con el correr de los días y con el incremento de personas viviendo ahí, el lugar se había transformado en un asentamiento precario que generaba el malestar de los vecinos y transeúntes», explicaron en un comunicado.
La Policía de la Ciudad actuó con el apoyo de personal de Espacio Público e Higiene Urbana y operadores del BAP levantaron el asentamiento.
Por su parte, el ministro de Seguridad, Waldo Wolff, aseguró que están trabajando para «fortalecer el orden en el espacio público» y que la prioridad es «cuidar a todos los porteños».
«Hoy lo hicimos posible a partir de trabajo articulado y con una firme convicción de trabajar para que la Ciudad tenga orden: Eso es lo que nos pidió el Jefe de Gobierno y así lo estamos instrumentando”, dijo Wolff en el comunicado.
Finalmente, el secretario de Seguridad y jefe de Policía Diego Kravetz indicó que «gracias al gran profesionalismo de la Policía de la Ciudad» lograron «liberar el espacio público que estaba tomado hace más de cuatro meses»:
«Por orden y decisión política, a partir de ahora Plaza Lavalle vuelve a ser de todos los vecinos», concluyó Kravetz.