Policiales

Piden 23 años para un narco peruano que operaba en Rosario ya condenado y 8 para un financista que le cambiaba dólares


El pedido ante el Tribunal Oral Federal (TOF) 3 de Rosario fue el corolario del alegato final de un juicio realizado hoy por el fiscal del caso, Federico Reynares Solari, quien remarcó que en esta causa siguen “la ruta del dinero, y eso es una novedad”.

Un fiscal federal de Rosario pidió hoy una pena unificada de 23 años para el piloto peruano Julio Rodríguez Granthon, ya condenado dos veces por narcotráfico, y de 8 años de prisión para el extitular del Puerto, Gustavo Shanahan, un financista acusado de cambiarle pesos por dólares a la organización criminal, informaron fuentes judiciales.

El pedido ante el Tribunal Oral Federal (TOF) 3 de Rosario fue el corolario del alegato final de un juicio realizado hoy por el fiscal del caso, Federico Reynares Solari, quien remarcó que en esta causa siguen “la ruta del dinero, y eso es una novedad”.

“Las bandas que compran material estupefaciente no pueden ir con una tarjeta a comprar cocaína, necesitan dólares”, sostuvo el fiscal en el alegato, para señalar que “la cocaína es un commodity, y los dólares son fundamentales para el giro comercial”.

“Alguien advertido como Shanahan sabe eso”, dijo Reynares Solari sobre el financista, a la vez que acusó a Rodríguez Granthon como organizador del tráfico de estupefacientes en la modalidad de comercialización, y al contador como coautor del mismo delito.

El fiscal también pidió penas de menor cuantía para otros acusados que llegaron a juicio, a quienes señaló como miembros de la una banda narco que distribuía drogas en el barrio Villa Banana de Rosario dirigidos desde la cárcel por Rodríguez Granthon.

La causa se inició en abril de 2021 a partir de una información que daba cuenta que en una vivienda de Villa Banana se comercializaba drogas al menudeo, y que era regenteada por dos hermanos de apellido Pérez, luego identificados como Facundo y Ubaldo.

Según el fiscal, Facundo Pérez era el nexo del “Peruano” Rodríguez Granthon, un piloto civil condenado a 15 años de prisión en dos causas por narcotráfico.

Además, está siendo juzgado como partícipe necesario del crimen del exconcejal de Rosario y padre de una de las víctimas del triple crimen de militantes sociales, Eduardo Trasante.

De acuerdo con lo ventilado en el juicio oral, la vigilancia policial sobre el búnker de venta de drogas permitió advertir que el dinero recaudado era llevado a un domicilio de calle Ovidio Lagos al 400.

La Policía Federal Argentina (PFA), que realizó la pesquisa, fotografió y filmó el lugar y descubrió que desde allí trasladaban bolsos y mochilas a unas oficinas ubicadas en pleno centro de Rosario, en España y Rioja.

Ese sitio fue allanado en octubre de 2021, luego de que una policía de civil que realizaba seguimientos en Villa Banana fuera baleada por un miembro de la banda de Rodríguez Granthon.

La Policía secuestró en esas oficinas, donde funcionaba una “cueva” financiera de Shanahan, un hombre de 67 años que fue titular de Terminal Puerto Rosario (TPR), más de 30.000.000 de pesos.

“Queda absolutamente claro que Shanahan dirigía una cueva, no hay interrogantes sobre eso. Desde el aspecto objetivo comete una intermediación financiera no autorizada”, sostuvo Reynares Solari durante el alegato.

En ese sentido, agregó: “El aspecto subjetivo me permite determinar que el dinero que circulaba por sus oficinas provenía de una actividad narcocriminal”, algo que el financista no podía desconocer.

Para el fiscal, “toda la ganancia que se generaba en Villa Banana era viabilizada a la ‘cueva’ de calle España”.

Con esos elementos, Reynares pidió al tribunal integrado por los jueces Osvaldo Facciano, Eugenio Martínez y Mario Gambacorta, la pena unificada de 23 años de cárcel para Rodríguez Granthon, y de 8 años para Shanahan.

A la vez, solicitó la pena de 6 años para los imputados Alfonzo Sebastián Sciortino y Gustavo Báez Aguilar por tráfico de estupefacientes, y de 3 años y 6 meses de prisión para Juan Román González, por el mismo delito, pero en calidad de partícipe, indicaron las fuentes.