Policiales

Conductor de colectivos imputado por simular ser subjefe de la TOE y brindar cursos de manejo de armas


Según el fiscal Hernández, la investigación reveló que Rolón ostentaba uniformes, insignias y distintivos de la TOE entre agosto y octubre de este año

Víctor Hugo Rolón, un conductor de colectivos, se encuentra ahora en el centro de una investigación legal luego de ser imputado por el fiscal Ezequiel Hernández en Santa Fe. Rolón, según la acusación, simulaba ser el subjefe de la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) de la Policía local, brindando cursos de manejo de armas en diversas ubicaciones del país. Los delitos imputados contra él incluyen la usurpación de título por el uso indebido de insignias o distintivos del cargo y encubrimiento.

La pesquisa se inició cuando el personal de la TOE alertó sobre la actividad sospechosa de Rolón el pasado 5 de octubre. La audiencia imputativa tuvo lugar la semana pasada, donde el juez Sebastián Szeifert dictó normas de conducta que Rolón deberá cumplir durante el curso de la investigación. Estas normas incluyen una caución personal de 90 mil pesos, la obligación de fijar domicilio, la prohibición de contactar o acercarse a testigos y la prohibición de tener y portar armas de fuego.

Según el fiscal Hernández, la investigación reveló que Rolón ostentaba uniformes, insignias y distintivos de la TOE entre agosto y octubre de este año. No solo se hacía pasar por un representante de la TOE sino que participaba activamente en cursos de capacitación en otras provincias, específicamente en temas relacionados con la manipulación de armas. Se descubrió que incluso adquirió un chaleco balístico que fue robado a la policía de Santa Fe.

Los allanamientos realizados en el marco de esta investigación arrojaron resultados significativos. Se incautaron armas y diversos elementos relacionados con la actividad ilegal de Rolón. En su domicilio se encontró una pistola calibre 9 milímetros, cargada y lista para ser utilizada. También se confiscaron uniformes, insignias, handys, placas y portaplacas con distintivos de la policía de Santa Fe, así como numerosos elementos que simulaban pertenencia a la TOE.

En cuanto a las prendas de vestir, se recuperaron chaquetas y remeras con rótulos identificatorios, una boina con el escudo de la TOE y un uniforme completo con un sombrero tipo monte. Además, se hallaron elementos que demostraban la conexión de Rolón con otras fuerzas de seguridad, como un distintivo de la Policía Federal Argentina y otro de una agrupación de policías de la provincia de Chaco.

El fiscal Hernández destacó la cooperación de la verdadera TOE al denunciar las actividades fraudulentas de Rolón. Integrantes de la policía de Chaco llamaron a la base de la TOE para solicitar información sobre una capacitación a la que Rolón los había invitado, y fue en ese momento que se descubrió la farsa. Esta acción rápida y coordinada permitió a las autoridades desmantelar una red de engaños que, de lo contrario, podría haber continuado.

El caso de Víctor Hugo Rolón destaca la importancia de la vigilancia y la acción rápida de las fuerzas de seguridad para evitar que individuos malintencionados se hagan pasar por representantes legítimos de las fuerzas del orden. La simulación de roles policiales no solo pone en peligro la confianza pública sino que también puede tener consecuencias graves cuando se trata de actividades ilegales, como el manejo indebido de armas y la posesión de equipo policial.