La vicepresidenta Cristina Kirchner presidió la corta sesión en la que diputados y senadores de todos los bloques ratificaron a los participantes de la segunda vuelta que tendrá lugar el próximo 19 de noviembre
En un clima de fuerte efervescencia, los dos candidatos presidenciales que se medirán en el balotaje, Sergio Massa (Unión por la Patria) y Javier Milei (La Libertad Avanza) se robaron todos los flashes en la Asamblea Legislativa que proclamó a las dos fórmulas que obtuvieron la mayor cantidad de votos en la primera vuelta.
La vicepresidenta Cristina Kirchner encabezó la corta pero intensa sesión en la que acaso por primera vez desde que preside el Senado no fue la protagonista excluyente.
La líder del kirchnerismo, que dejará de tener cargo y fueros en diciembre, fue la maestra de ceremonias y telonera de los dos postulantes que se medirán el 19 de noviembre.
El ministro de Economía sorprendió al asistir a la Cámara baja, una situación que no estaba en los papeles de nadie, y se ubicó en uno de los palcos centrales del recinto con la sesión recién empezada. Concentró la atención y los aplausos de los legisladores oficialistas, que se dieron vuelta para arengarlo.
Massa preparó esa foto en silencio y estricta reserva, buscando el efecto sorpresa. Abajo suyo, con gesto impertérrito y cara de pocos amigos, Milei siguió el desarrollo de la sesión desde su banca junto a su compañera de fórmula, la también diputada nacional Victoria Villarruel.
El candidato libertario no cambió el semblante adusto ni siquiera cuando escuchó los silbidos en su contra cuando la presidenta de la comisión escrutadora, la diputada Lucía Corpacci, leyó los resultados que había obtenido La Libertad Avanza.
Los abucheos se combinaron con palmas para él que partieron de representantes de Juntos por el Cambio que ya están jugando abiertamente para el libertario, como Cristian Ritondo, Alberto Asseff, Humberto Schiavoni y un muy efusivo Carlos Zapata, el salteño del partido ultraconservador Ahora Patria que lidera junto al recordado ex diputado Alfredo Olmedo.
Zapata, que supo integrar Juntos por el Cambio hasta hace poco tiempo, ya pegó el garrochazo e integra las filas libertarias. El salteño marcó marcó un camino y lo seguirán otros, pero ese capítulo se develará más adelante.
Culminada la Asamblea Legislativa, que duró poco más de media hora, se vació lentamente el recinto pero la acción se prolongó en los pasillos laterales al recinto por los cuales se fueron retirando los diputados y senadores.
Massa se fue por otro acceso, pero Milei enfiló por el mismo camino que el resto de los legisladores hacia el Salón de Pasos Perdidos, por donde estaba aguardando una jauría de prensa que se abalanzó sobre él al instante.
Los forcejeos y empujones derivaron en que un camarógrafo cayera de espaldas sobre este cronista, pero no hubo que lamentar ningún tipo de consecuencias.
«Estamos mejorando fuertemente en el operativo de fiscalización para que no se nos escape la elección por ahí», contestó ante una pregunta periodística, mientras caminaba hacia la cafetería del primer piso del Palacio Legislativo, escoltado por Villarruel.
La batahola de periodistas y camarógrafos en torno suyo no se desarmó hasta que atravesó la puerta de la cafetería y allí empleados de seguridad le impidieron el paso a los reporteros que seguían al economista de derecha liberal como perros de presa.
El acto fue apenas una formalidad para proclamar a las dos fórmulas que quedaron en pie tras la batalla del 22 de octubre pasada, según lo dispuesto en el artículo 120 del Código Electoral.
Los datos del resultado del escrutinio definitivo se oficializaron este mismo jueves y fueron leídos en voz durante la Asamblea Legislativa. Luego se leyó el dictamen que habilitaba a los candidatos de Unión por la Patria y La Libertad Avanza a competir el 19 de noviembre, el cual fue avalado a mano alzada por los legisladores presentes.
Transcurrida esta instancia, Unión por la Patria y La Libertad Avanza tendrán un plazo de cinco días para confirmar o declinar la voluntad de participar en el balotaje.