El Instituto Nacional del Agua advirtió que el río tendrá un importante repunte que llevará a niveles de alerta o evacuación a los puertos de poblaciones ribereñas
Los productores ganaderos del norte de Santa Fe comenzaron a retirar gran cantidad de ganado vacuno de las zonas costeras bajas y de las islas ante la inminente crecida del río Paraná, que recibe un importante caudal desde el río Iguazú, por lo que las autoridades solicitaron precaución al transitar por la zona.
En ese sentido, el Instituto Nacional del Agua (INA) advirtió que el río Paraná tendrá un importante repunte que llevará a niveles de alerta o evacuación a los puertos de las poblaciones ribereñas a partir de la crecida de los últimos días del río Iguazú.
Por ejemplo, el río Paraná en Puerto Reconquista tenía hoy una altura de 4,05 metros, de acuerdo a información de Prefectura Naval Argentina, pero el INA estimó que para el 14 de noviembre estará en valores de entre 5,25 y 5,95 metros.
Ese repunte anticipa dificultades, ya que esa estación fluvial entra en alerta a los 5,10 metros, en tanto el nivel de evacuación se estima en 5,30 metros.
El intenso movimiento de hacienda llevó al municipio de Villa Ocampo, ciudad situada 83 kilómetros al norte de Reconquista y a 400 kilómetros de la capital provincial, a solicitar precaución al conducir hacia el Paraná Miní y por los caminos rurales.
«En caso de encontrarse con el arreo de animales, detener la marcha o transitar lentamente, para no generar mayores inconvenientes a quienes están obligados a movilizar su hacienda hacia campos más altos», indica un comunicado de las autoridades comunales.
La misma situación se observa en otras ciudades de la zona, donde los productores se encuentran con la dificultad que no hay campos disponibles en zonas altas, en parte debido a que por la sequía no hubo todavía una recuperación de las pasturas.
Otra dificultad que asoma es que esta es una época de parición y hay muchas vacas preñadas, lo que complica el traslado de los animales y lleva a analizar bien los pasos a seguir.
En principio, la urgencia pasa por retirar los terneros e ir viendo si será necesario mover la totalidad de la hacienda, ya que, al no haber disponibilidad de campos para el traslado, una de las alternativas que surge es la de vender.
Como suele suceder ante situaciones de este tipo, es cada vez más probable que se utilicen los costados de las rutas nacional 11 y provincial 1 para alojar provisoriamente a los animales, lo cual plantea un problema de seguridad en la circulación por esos corredores.
Respecto de la cantidad de cabezas que pueden estar en movimiento, el director de Producción Pecuaria y Avícola de la provincia, Pablo Fiore, estimó que «fácilmente hay más de 500.000 cabezas» y comparó que entre 2008 y 2009 «llegó a haber más de 1,5 millones de cabezas» en las islas sobre el río Paraná.
El funcionario admitió que no hay datos precisos debido a que «a veces es más de lo que se informa oficialmente».
Ayer, el subgerente de Información y Alerta Hidrológico del INA, Juan Borus, explicó que la crecida del Iguazú a la altura de las Cataratas «ha generado una onda de crecida que va a terminar de definir su pico en (la represa de) Yacyretá» entre hoy y mañana.
«Esa onda de crecida se va a trasladar rápidamente por el tramo argentino del río, de Corrientes para abajo, llegando a configurar un pico en Santa Fe capital a la altura del 15 o 16 de noviembre, con un valor cercano a los 5,30 metros que es el nivel de alerta», indicó Borus.
El funcionario sostuvo que habrá que estar «atentos al pronóstico meteorológico que se vaya dando sobre el corazón de la Cuenca del Plata, que es la provincia de Misiones y alrededores donde, cuando se dan lluvias significativas, el resultado es rápido, los excedentes son importantes y se forma un pulso de repunte importante».
El funcionario explicó que «la creciente del Iguazú, que en general tiene poco volumen, en este caso tiene un volumen mayor del habitual porque en Cataratas se ha mantenido muy alto desde la segunda semana de octubre».
«Está entrando mucho caudal, un par de días atrás hubo un pico muy significativo en Cataratas, del orden de 22.000 metros cúbicos por segundo cuando el caudal medio es del orden de 2.000 metros cúbicos», añadió.