En una noche llena de magia musical, los hermanos Andersen encantaron a una multitud de fanáticos con su música única y su actuación cautivadora
La noche del sábado 23 de septiembre fue la primera vez en que El Plan se subió al escenario del Anfiteatro de Rosario, al aire libre y con un entorno natural, que proporcionó el telón de fondo perfecto para una noche de transformación. Desde el momento en que la banda pisó el escenario, quedó claro que sería inolvidable.
«Muchas gracias por estar acá, estamos muy contentos de estar en Rosario y en este lugar hermoso», dijo Seba Andersen luego de los dos primeros temas.
Tras agotar un estadio Luna Park deleitaron a la audiencia con un repertorio que incluyó sus éxitos más reconocidos y algunas sorpresas musicales. Las armonías vocales de los hermanos Andersen, combinadas con su virtuosismo instrumental, crean una experiencia digna de ser vivida.
La banda conocida por su fusión de géneros que abarcan desde el rock hasta el folk y el pop, demostró su versatilidad musical una vez más. En un segmento acústico con fogón incluido donde sonaron «Llega, llega, llega», «Viajo con el sol» y «Entrañas», ocurrió una propuesta de matrimonio que puso de pie a todo el Anfi.
La audiencia estuvo inmersa en la actuación de principio a fin, aplaudiendo y coreando las canciones mientras El Plan compartía su pasión por la música. La conexión entre la banda y sus seguidores es palpable.
Sobre el final de la noche, agradecieron efusivamente a su público: “Muchas gracias por regalarnos esta noche hermosa, nos vamos felices de haber venido, y con ganas de volver”. El show fue una muestra de que su música resuena en los corazones de los fans.