Además, desde el Palacio de los Leones buscan renovar la flota y mejorar la calidad del servicio
La administración del intendente Pablo Javkin se encuentra en un período clave con varios desafíos significativos por delante, y uno de los temas cruciales en la agenda de Rosario es el sistema de transporte público. El mandatario adelantó que se espera un próximo ajuste en la tarifa del boleto que se implementará en octubre. Se estima que el nuevo precio del boleto rondará los 185 pesos.
Esta medida responde a la creciente presión económica y a los aumentos de costos operativos asociados al sistema de transporte público. A modo de referencia, Santa Fe capital recientemente aumentó su tarifa a 185 pesos y planea elevarla a 220 pesos en noviembre.
En otro orden, para el ciclo lectivo de 2024, la ciudad planea aumentar la flota de colectivos en funcionamiento de 690 a 730 vehículos. Esto se acerca al límite establecido en los actuales contratos de concesión y tiene como objetivo mejorar la accesibilidad y la frecuencia del transporte público en la ciudad.
La decisión del gobierno local es mantener la visión de un «Boleto Federal», en colaboración con la mencionada capital santafesina y la ciudad de Córdoba, a pesar de los desafíos financieros.
Además de la expansión de la flota de colectivos y el ajuste tarifario, la gestión de Javkin apuesta a opciones de movilidad más sostenibles. Se están evaluando alternativas como la movilidad eléctrica y el gas licuado para reducir la huella ambiental del transporte público. Actualmente, se están introduciendo colectivos eléctricos en la línea K, con planes para agregar más en el futuro cercano y, posiblemente, reintroducir la línea M.
La tarea de mejorar el transporte público en Rosario también incluye el análisis de la frecuencia de las rutas. Si bien algunas líneas funcionan de manera eficiente, otras tienen un servicio deficiente.