Érica Altamirano recibió la pena como jefa de la organización cuando su hijo fue detenido y por coimear con 50.000 pesos a un policía para permitir la liberación de su hija
La madre de Brandon Bay, el jefe de la violenta banda narco rosarina conocida como “Los Gorditos”, fue condenada a 7 años y 4 meses de prisión como jefa de la organización cuando su hijo fue detenido, y por coimear con 50.000 pesos a un policía para permitir la liberación de su hija, informaron hoy fuentes judiciales.
La mujer, identificada por los investigadores como Érica Altamirano (50), aceptó los delitos de asociación ilícita y cohecho en un juicio abreviado acordado entre su defensa y el fiscal Pablo Socca, que fue homologado por el juez José Luis Suárez, precisaron las fuentes.
Altamirano había sido condenada en mayo del año pasado junto a una de sus hijas, Aldana Bay, a 6 años y 6 meses de prisión por comercio ilegal de estupefacientes en un juicio de la Justicia Federal.
Ahora, la mujer suma otros 7 años de condena como jefa desde la calle de la organización criminal que su hijo Brandon dirige desde la cárcel.
Según el juicio abreviado, la banda de Bay, conocida como “Los Gorditos”, se dedicó “a cometer delitos contra las personas, contra la vida, contra la propiedad y contra la administración pública” en la localidad de San Lorenzo (ubicada en el Gran Rosario) y en el barrio Tiro Suizo del sur de esta ciudad santafesina.
“Esta organización funciona al menos desde el 20 de agosto de 2019 hasta el hasta al menos 15 de septiembre de 2021” cuando comenzó a ser desarticulada.
De acuerdo al procedimiento abreviado, sus objetivos criminales fueron “ocupar sectores de la ciudad de Rosario y de San Lorenzo y excluir de allí a otras bandas antagónicas”.
Para el fiscal Socca, Altamirano fue “la encargada de la organización criminal desde que su hijo y otros miembros importantes de la banda cayeran detenidos”.
Así, cumplía órdenes emanadas desde la cárcel por Brandon Bay a través de llamadas telefónicas, y se encargaba de la venta drogas, su fraccionamiento y su ocultamiento en su domicilio de calle Dinamarca al 500bis de Rosario.
Según el la sentencia, administra y gestiona búnkeres de venta de drogas y guarda en su vivienda armas y teléfonos celulares utilizados por otros miembros de la organización.
Además, Altamirano fue condenada por el pago de 50.000 pesos a un policía de la seccional 32da de Rosario, el suboficial Axel Teliz, para que incluyera información falsa en un acta de procedimiento y permitiera la liberación de su hija Flavia Bay y la pareja de ella, Luis Gabriel Saucedo, informó el Ministerio Público de la Acusación (MPA).
De acuerdo a la investigación, el 9 de septiembre de 2021 Flavia y su pareja fueron detenidos por personal del Comando Radioeléctrico en un automóvil que tenía pedido de captura por robo.
Los policías los dejaron en la seccional 32da, donde el Saucedo pergeñó con el suboficial Teliz un plan para quedar en libertad.
La pesquisa determinó que Saucedo llamó a Altamirano a la 1.35 del ese día y le dijo que le llevara $50.000 porque había sido detenido junto a su hija.
Según el fiscal Socca, con el acuerdo policial incluyó en el acta de detención un boleto de compra-venta falso, con los datos del dueño del vehículo robado, a nombre de Flavia Bay.
Eso fue lo que personal de la seccional le informó al fiscal, quien engañado les otorgó la libertad.
El policía Teliz fue condenado a una pena de 3 años de prisión por cohecho activo e incumplimiento de sus deberes, recordaron fuentes judiciales.
Mientras que el 1 de agosto, el jefe de “Los Gorditos”, Brandon Bay, fue condenado a prisión perpetua al término de un juicio en la ciudad de San Lorenzo por tres homicidios consumados y otros tres intentos de asesinatos, junto a miembros de su organización criminal.
En la causa por asociación ilícita en la que su madre fue condenada, Bay está imputado con prisión preventivo como organización de la banda, confiaron fuentes del caso.