El gobernador electo sacó más de un millón de votos y entró en la historia; el intendente fue reelecto por 16.000 sufragios y el justicialismo perdió en toda la provincia
Por Diego Mussetta – CLG
Santa Fe eligió. Y dejó un gran mensaje. La gente votó y definió un cambio rotundo en la provincia de Santa Fe. De esos cambios que dejan huellas. Que dejan ganadores y vencidos. Y mucha tela para cortar. Unidos para Cambiar Santa Fe se llevó todos los premios de la mano un imparable Maximiliano Pullaro, quien con su millón de votos en la mochila entró en la historia de esta provincia, derrotando a un peronismo maltrecho y sin líderes y demostrando que construyendo se puede. Lo que soñó hace dos años, hoy lo materializó. Aquella vez masticó bronca, pero este domingo saboreó las mieles del éxito.
No sólo Pullaro fue el gran ganador de esta jornada histórica en Santa Fe. También lo fueron los representantes de Unidos en las diferentes listas de Diputados y Senadores, ya que ahora el gobernador electo tendrá a ambas Cámaras de su lado y sin dudas que será fundamental para su administración. Mientras en Diputados la nómina que encabezó Clara García sopapeó a un Omar Perotti acorralado y seguramente ahora tratando de dar explicaciones a sus pares peronistas, en Senadores el frente que lidera Pullaro se quedó con 13 de las 19 bancas, marcando un hito.
A nivel local, y sufriendo, Pablo Javkin logró revalidar sus credenciales gracias a que más de 240.000 rosarinos le dieron la chance de una segunda oportunidad, esa que el intendente espera ahora con «viento a favor». No fue fácil la compulsa contra un batallador Juan Monteverde, que por momentos se ilusionó con el golpe, pero que debió conformarse con un caudal importante de votos, aunque deberá esperar otros cuatro años para ir por una revancha.
En el Concejo, también Unidos logró otra victoria clara. La lista que encabezó María Eugenia Schmuck duplicó al candidato del peronismo (Mariano Romero) y a la candidata de Monteverde (Caren Tepp), por lo que Javkin tendrá mayoría para avanzar en sus proyectos en el Palacio Vasallo.
Santa Fe, unida
La imagen de la boat santafesina teñida de un mismo color resume lo que se vivió este domingo. El frente de frente, que se armó para ganar todo, ganó todo. Y de qué manera. Por goleada, y hasta por baile. Pullaro superó el millón de votos, lo que lo convierte en el político con más aceptación de la historia en la provincia de Santa Fe. Ratificó lo que hizo en las PASO, pero esta vez ‘por los porotos’. Se preparó, esperó su chance luego de aquella derrota legislativa en 2021, recorrió cada rincón de la provincia y su mensaje encontró eco en los santafesinos. Y más en los rosarinos, quienes confían en que su liderazgo pueda darle paz y tranquilidad a una ciudad jaqueada por la violencia y la inseguridad.
La ola pullarista arrasó también en Diputados de la mano de Clara García, que con esta victoria llega a la Legislatura con 28 legisladores que traccionarán los pedidos del gobernador, dejando a Perotti como opositor y sin la presidencia. Pero no sólo esa ola arrasó en la Cámara baja, sino que también la nota se dio en Senadores, donde el peronismo no tenía minoría desde 1987. La hora del cambio llegó, y en la Cámara alta el gobernador electo también tendrá mayoría.
Rosario, más unido
Javkin se jugaba una final. De esas que pintaban para ser épicas. Le tocó gobernar en el peor momento del país, con los gobiernos nacional y provincial en contra, con la llegada de una pandemia, sequía, incendios en las islas y una economía en crisis. Timoneó cuando hizo falta, enderezó el barco y lo mantuvo a flote, pero los crímenes, robos y la ola de inseguridad lo jaquearon también. Se hizo fuerte en las PASO, pero había dudas sobre los apoyos de cara a las generales. Y esas dudas se disiparon este domingo: gracias al apoyo del sector de Tessandori, de Charly Cardozo y de Estévez, pudo derrotar a Monteverde, quien se robusteció al imponerse en las primarias sobre el candidato peronista Roberto Sukerman. La diferencia en favor de Javkin fue exigua, de apenas 16.000 votos, aunque en las últimas dos compulsas a intendente la ventaja siempre fue ajustada. El rosarino le dio una nueva chance, otros cuatro años, aunque ahora con «viento favor», seg{un dijo el propio intendente. Es hora de empezar a tomar vuelo…
El peronismo, nocaut y en la lona
La falta de nuevos liderazgos, los errores en la conducción, los vaivenes de un Perotti que iba y venía, la derrota en las PASO a intendente y que por primera vez no haya un candidato justicialista al Palacio de los Leones y una interna feroz dejaron al peronismo santafesino y rosarino en la lona y nocaut.
Sin dudas que Perotti (¿es peronista?) fue el gran perdedor. Quizás hasta el padre de esta derrota. Una por hacer una pobrísima gestión que trató de maquillar sobre el final inaugurando obras y otra por especular a la hora de elegir candidatos y resignarse a último momento en busca del milagro con Marcelo Lewandowski. Milagro que no llegó porque al actual senador nacional lo dejaron solo y remó hasta donde pudo, sin al ‘aparato’ de su lado. Apenas el 28% del electorado eligió a Perotti en la categoría diputado, algo que habla a las claras de la pésima performance realizada.
A nivel local, el peronismo no aportó candidato a la intendencia, aunque el PJ apoyó a Juan Monteverde en la interna. El líder y fundador de Ciudad Futura estuvo cerca del batacazo. Pero no lo alcanzó. Sabe que tiene cuatro años por delante y mucho trabajo por hacer para ir por una nueva oportunidad en 2027.
La historia vuelve a poner a un dirigente radical como Maximiliano Pullaro en la gobernación. A un político joven, que se formó junto a Miguel Lifschitz y que se consolidó cuando dio el salto a Juntos por el Cambio. Conoce la provincia, sus problemas y tiene experiencia en gestión. Ahora le llegó el tiempo de demostrarlo. Tiene todas las herramientas que quería. El crédito está abierto. Y mucho más luego del contundente apoyo de más de un millón de santafesinos que confiaron en él. Es la hora del cambio en Santa Fe. Y con Pullaro al frente.