Más de 200 familias autoconvocadas elevarán el pedido urgente al Ministerio de Educación. En principios reclaman cargos en el anexo de la 398.
Más de 200 familias autoconvocadas “sin banderas pero con el mismo objetivo y preocupación: el derecho a la educación secundaria pública de sus hijos”, como aclararon, organizaron una mateada para el sábado 5 de agosto en la plaza San José de Funes, a las 15, y así juntar firmas a la carta que enviarán al Ministerio de Educación con el reclamo de una escuela secundaria pública en la ciudad. Si bien saben de los tiempos aletargados del Ministerio, por el momento se conforman con la creación de cargos para el anexo de la escuela secundaria 398, Islas Malvinas, ubicado en José Ingenieros 3750. El espacio, hasta hace poco ocupado por el jardín 349 que ya se mudó a su edificio propio, quedó vacante y podría ocuparse por dos divisiones de primer año en el turno mañana. Cabe señalar que, a groso modo, los padres y madres autoconvocados afirman que en diciembre terminarían séptimo grado unos 300 alumnos de las escuelas públicas de la ciudad y, claramente, no habrá lugar para todos en marzo próximo. Y la problemática crece.
Representantes de este grupo se reunieron días atrás con la coordinadora de educación de la ciudad, Graciela Di Brino, quien les aclaró que más allá de los proyectos en Funes, hay que esperar por terrenos, planos, licitaciones, toma de medidas y construcciones, pero a tiempos que no van en paralelo con la necesidad de estas familias. “Incluso el grupo de Whatsapp está integrado por familias que tienen a sus hijos en jardín de infantes porque esta problemática, lamentablemente, da para largo, porque cada vez más gente viene a vivir a esta ciudad”, aclaró uno de sus integrantes a este medio.
Por otro lado, remarcó que las escuelas privadas abren su inscripción entre agosto y septiembre, mientras que las públicas entre octubre y diciembre, “y muchos los anotan en la privada, para asegurarse un lugar, por las dudas. Cosa que nos juega en contra porque en la pública, al ver que no les da el cupo y que tu hijo ya está inscripto en la privada, el tema se cierra ahí”.
Pero eso no es todo, si bien las cuotas de las entidades privadas son elevadas, por más esfuerzo que las familias hagan por cubrirlas, “son muchos en segundo año los que se van a la pública porque no pueden sostener el nivel privado”, motivo por el cual la problemática de la falta de cupo se transforma en una especie de bola de nieve, que crece sin parar.
“Necesitamos la mayor cantidad de firmas de la gente de Funes, no sólo de quienes padecen esta problemática, sino de todos, porque es algo que se agrava con el correr de los meses y estamos hablando, nada menos, que del derecho a la educación”, concluyó.