El Ministerio Público de la Acusación (MPA) informó que "las adolescentes fueron abusadas en la época en la que iban a la escuela secundaria, una entre 2011 y 2014 y la otra entre 2018 y 2020”.
Un agente policial de 41 años fue imputado por la Justicia de Santa Fe por el abuso sexual de dos adolescentes, que son hijas de mujeres que eran sus parejas, y por haber destruido evidencia de esa y otras causas penales al incendiar una fiscalía, informaron hoy voceros judiciales.
El imputado fue identificado con las iniciales M.A.M., quien prestaba servicio en la ciudad de San Javier y está acusado de haber vulnerado la integridad sexual de las adolescentes cuando convivió con ellas debido a que era la pareja de sus madres.
Además, el Ministerio Público de la Acusación (MPA) informó que «las adolescentes fueron abusadas en la época en la que iban a la escuela secundaria, una entre 2011 y 2014 y la otra entre 2018 y 2020”.
La Fiscalía planteó que “el policía agredió sexualmente a las hijas de sus parejas, les tomó fotografías y las filmó en el marco de los sometimientos”, en hechos que «se repitieron durante años, por lo que tuvieron entidad suficiente para afectar su salud física y psicológica”.
En cuanto al incendio en la Unidad Fiscal San Javier, fue cometido el domingo 12 de julio de 2015, cuando «el policía escaló un tapial lindero, rompió una reja que protege el techo del patio y forzó una ventana de acceso a las oficinas”.
“Una vez dentro, se apoderó de siete teléfonos celulares, un disco rígido que extrajo de una computadora, una pistola calibre 9, un revólver calibre 22 y otro calibre 32, una sábana y una remera que estaban en la sala de efectos”, enumeró la Fiscalía.
Luego colocó carpetas, papeles, telas, gomaespuma y maderas sobre el piso de la sala y los prendió fuego, que se propagó hacia otros elementos y habitaciones, lo cual generó daños en las instalaciones de la Fiscalía y la destrucción de evidencias, muebles y objetos de uso cotidiano”.
El policía está acusado de abuso sexual con acceso carnal y abuso sexual gravemente ultrajante, ambos calificados porque la víctima era menor de edad y convivía con él, en tanto en el otro caso se lo investiga como autor de abuso sexual simple calificado por la guarda y la convivencia.
También se le imputó el incendio doloso con peligro común para los bienes, robo calificado por haber sido cometido con escalamiento y por tratarse de un miembro de una fuerza policial, y se le endilgó la autoría de amenazas simples, tenencia ilegítima de arma de fuego de uso civil y desobediencia de mandato judicial.
Por último, los voceros señalaron que en una audiencia prevista para mañana el juez Nicolás Falkenberg resolverá un pedido de la Fiscalía para que el imputado continúe en prisión hasta el juicio oral.