Más tarde, el Presidente encabezó el acto de derogación del decreto 870/18 que había promovido la gestión del expresidente Mauricio Macri sobre el Puerto de Buenos Aires y que determinaba la utilización de una única terminal operativa.
El presidente Alberto Fernández habló este miércoles con Celeste Saulo, nueva secretaria general de la Organización Meteorológica Mundial (OMM); Frida Armas Pfirter, electa jueza del Tribunal Internacional del Derecho del Mar; y Federico Ariel, ganador del premio internacional Unesco-Al Fozan; encabezó además el acto de derogación del decreto 870/18 del expresidente Mauricio Macri sobre el Puerto de Buenos Aires que determinaba la utilización de una única terminal operativa y anunció el decreto 299/2023 de licitación para el comienzo de obras.
En la primera audiencia, realizada en el despacho presidencial, Fernández se entrevistó con Saulo y con Armas Pfirter, mientras que con Ariel lo hizo por videoconferencia.
Saulo, titular del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), fue elegida el pasado 1 de junio como secretaria general de la Organización Meteorológica Mundial (OMM) para el período 2024-2027, convirtiéndose en la primera mujer en ocupar el cargo y la primera latinoamericana en asumir esa posición.
Saulo afirmó que su nombramiento «es una enorme responsabilidad, por considerar que es un momento clave para la acción donde la crisis climática nos afecta y preocupa», y agregó que «la elección de una persona que viene de la Argentina, es una señal» en ese sentido.
También indicó que «es fundamental que los Estados entendamos que los Servicios Meteorológicos e Hidrológicos tienen una función fundamental en la adaptación y mitigación del cambio climático, así como también en la agenda de reducción de riesgos de desastres».
Por su parte, Armas Pfirter fue elegida jueza del Tribunal Internacional del Derecho del Mar para el período 2023-2032 el 14 de junio pasado, durante la 30° Reunión de Estados Parte de la Convención de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar (Cnvemar), en Nueva York, Estados Unidos.
Fue la única candidata mujer de las diez candidaturas disponibles de los cinco grupos regionales y será la sexta jueza de los 21 integrantes del Tribunal.
La jueza compartió el reconocimiento que recibe el país «por el trabajo que hace en materia de Derecho del Mar, a través de sus diplomáticas, diplomáticos y el ámbito académico», lo que consideró «muy importante seguir manteniendo en la acción de todos sus funcionarios y los jueces argentinos» que lleguen al Tribunal.
«La Argentina tiene mucho para dar a los otros estados y la comunidad internacional», finalizó Armas Pfirter.
En tanto, Federico Ariel, investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) y con quien Fernández habló por videoconferencia, recibió el 19 de junio el Premio Internacional Unesco-AI Fozan para la promoción de jóvenes científicos en ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas.
El mandatario estuvo acompañado por los ministros de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto, Santiago Cafiero; de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, y de Defensa, Jorge Taiana.
Más tarde, el Presidente encabezó el acto de derogación del decreto 870/18 que había promovido la gestión del expresidente Mauricio Macri sobre el Puerto de Buenos Aires y que determinaba la utilización de una única terminal operativa.
Y anunció mediante un nuevo decreto (299/2023) una futura licitación para el comienzo de las obras a cargo de la Administración General de Puertos que representen una verdadera ampliación y modernización, cuidando las fuentes de trabajo.
Ante más de un centenar de dirigentes gremiales, Fernández dijo en el Salón de las Mujeres del Bicentenario de Casa de Gobierno que esta medida es «la mejor forma de modernizar un puerto tan importante, el principal punto de ingreso y egreso de importaciones y exportaciones».
Acompañado por los ministros de Transporte, Diego Giuliano; y de Trabajo, Raquel ‘Kelly’ Olmos, Fernández refirió que quienes hablan de «modernización» y buscan «achicar y entregar a un solo operador de modernización no tiene nada de moderno».
Con esto «se discute el monopolio», señaló el mandatario, con la idea de «abrir el Puerto de Buenos Aires a más operadores», porque «el monopolio se adueña de precios y tarifas, y los precios finales empiezan a alterarse».
Para Fernández, «desmonopolizar es muy moderno» porque «tiende a la pluralidad del manejo tan importante como el del puerto» y resaltó «la competencia» para que «abarate costos de bienes y que sean menos costosos ingresarlos o sacarlos».
Recordó que su Gobierno ha sufrido «a Macri, la pandemia, la guerra y la sequía, pero nunca dejamos de defender y preservar las fuentes de trabajo, ni se dictó una norma que genere desempleo».
«No hemos quitado ni un derecho social en la Argentina», resaltó el jefe de Estado, y agregó que en este caso «estamos garantizado fuentes de trabajo de trabajadores portuarios».
Fernández recordó que «otros no piensan igual que nosotros» sino que pregonan «que el mercado determine quien trabaja y quien no».
«Con esa lógica vieron cerrar 23 mil pymes, sin inmutarse; una caída del salario del 20%, sin inmutarse; y son los que dicen en Jujuy que no van a doblegarse por los que queremos seguir preservando los derechos de los que trabajan, derechos de pueblos aborígenes y reclamar ante las autoridades, que es la protesta», señaló.
«Vamos a seguir cuidando el puerto», porque «gobernar es crear trabajo y preservarlo», finalizó.
Por su parte, Olmos manifestó que «el alcance de este decreto suscripto por el Presidente es para el funcionamiento del Puerto de Buenos Aires y la tarea del Ministerio de Trabajo es acompañar la preocupación de los trabajadores».
«Una nación como la nuestra tiene en el transporte fluvial y marítimo un aspecto muy importante de su soberanía nacional y son los trabajadores argentinos quienes mejor observan y prestan la atención adecuada a las condiciones que favorecen o no esa búsqueda de soberanía», resumió.
«Nos preguntamos que es modernidad», consultó, y respondió que «la modernidad es la movilidad social ascendente».
Un documento de la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval (Fempinra), que encabeza Juan Carlos Schmid, detalló que en el acto acompañaron al Presidente y a integrantes del Gabinete nacional los dirigentes sindicales que integran la organización marítima, portuaria y de la industria naval nacional.
Schmid ratificó la tarea realizada por Olmos y Giuliano y sostuvo que ambos funcionarios «dieron el puntapié final para reivindicar los reclamos que se produjeron durante casi un lustro para derogar el decreto».
El decreto 870/18 determinó la utilización de una única terminal operativa, en tanto con su derogación el Gobierno promueve ahora el uso y operación de dos terminales (interior y exterior) del puerto metropolitano y el mantenimiento de los puestos de trabajo.
«En 2018, mientras se lograba sostener las fuentes laborales en el Puerto de Buenos Aires con resistencia y lucha, Mauricio Macri puso en marcha un dispositivo legislativo que implicó otra vez el resquebrajamiento de la golpeada estructura portuaria», dijo Schmid.
El dirigente, que integra el consejo directivo de la Confederación General del Trabajo, aseguró que «la respuesta a esa situación fue contundente con unidad, organización, paros y movilizaciones, que demostraron la firmeza gremial ante una medida nociva para el comercio exterior».
«El acompañamiento y trabajo de los delegados y las comisiones de los gremios que integran la Fempinra fue clave para definir la situación de manera favorable. De esa manera se quebró la lógica de la integración vertical promovida por navieras y operadores portuarios, que maniatan a los gobiernos en el diseño de la logística», concluyó.