La Justicia estudia posibles irregularidades en la declaración de Corina de Bonis, la docente que denunció que fue secuestrada y torturada en la localidad bonaerense de Moreno. De acuerdo con lo trascendió, los investigadores de esta causa analizan el testimonio de la maestra, quien denunció ser raptada a principios de septiembre.
El procurador general bonaerense, Julio Conte Grand, señaló que podrían haber ciertas contradicciones entre las pruebas recolectadas y los dichos de la mujer y remarcó que «las circunstancias son diferentes» de cuando se inició la investigación.
«Creemos que la maestra es una víctima y analizaremos qué fue lo que le pasó», explicó el funcionario en declaraciones al diario Clarín.
Entre otras cosas, la mujer había dicho que fue obligada a subir a «un auto viejo, de color bordó», aunque ese vehículo no aparece en las cámaras de seguridad de la zona. Además, a los investigadores les habría llamado la atención que a la docente se la vio caminando por la calle en el horario cercano a cuando se habrían producido las agresiones, informó el mencionado medio.
Según se denunció en su momento, De Bonis fue presuntamente secuestrada y torturada por desconocidos, quienes le escribieron en la panza «Ollas no». En este sentido, quienes están a cargo de la causa habrían considerado que las heridas tenían un trazo prolijo y que eso no se corresponde con un supuesto intento de agresión.
Luego de los hechos, las principales autoridades provinciales expresaron su repudio por lo sucedido y se comprometieron a «investigar para dar con los responsables y llevarlos ante la Justicia».
«Repudio profundamente la violenta agresión que sufrió Corina De Bonis en Moreno. Mi solidaridad con ella, ya la estamos acompañando con la Dirección de Psicología Social y junto a los ministerios de Seguridad y Justicia estamos trabajando para encontrar a los responsables», escribió la gobernadora, María Eugenia Vidal en su cuenta de Twitter.