El multimillonario cuestionó la condición de un exempleado que se quejó tras nueve días sin saber si seguía contratado o no por la compañía
Elon Musk, el genio multimillonario poseedor de SpaceX y Twitter, quedó envuelto en otra polémica y debió disculparse vía Twitter, red social de la que ahora es dueño, luego de discutir y burlarse de un extrabajador de la compañía, quien había criticado que no se le informó de manera correcta sobre su salida de la empresa cuando fue despedido y decidió recriminárselo al empresario.
El informático Haraldur Thorleifsson, quien hasta hace poco trabajaba en Twitter, se conectó como hacía normalmente a su computadora para trabajar cuando se dio cuenta que no tenía acceso al sistema. Desde que Elon Musk tomó las riendas de la compañía, se vivieron caóticos meses de recortes y despidos, por lo que en ese momento se imaginó que podría haber perdido su empleo.
En su lugar, luego de nueve días sin recibir respuesta de Twitter sobre si seguía o no con el trabajo, Thorleifsson decidió enviarle un tuit a Musk para ver si podía captar la atención del empresario y obtener una respuesta acerca de su extraña situación laboral. “¿Tal vez si suficientes personas me retuitean usted me responda por aquí?”, se preguntó en un mensaje el lunes el usuario identificado como Halli.
Gracias a su insistencia, a la larga obtuvo una respuesta del multimillonario, quien procedió a interrogarlo sobre su trabajo, cuestionó la condición de discapacidad del exempleado, que sufre distrofia muscular y utiliza una silla de ruedas, y su necesidad de arreglos especiales. Además, en otro mensaje, acusó que Thorleifsson tiene una “cuenta activa y destacada de Twitter y es millonario” y que “el motivo por el que me confrontó en público fue para obtener una gran liquidación monetaria”
Mientras esto sucedía, Thorleifsson dijo que recibió un correo electrónico en el que se le informó que ya no era empleado de la compañía.
Sin embargo, luego de una catarata de críticas y menciones en Twitter, Elon Musk cambió de parecer el martes por la tarde y expresó: “Quisiera disculparme con Halli por malentender su situación. Estuvo basada en cosas que se me informaron que no eran ciertas o, en algunos casos, sí eran ciertas, pero no significativas”, tuiteó. “Él está sopesando la posibilidad de permanecer en Twitter”.
Thorleifsson no respondió de momento el mensaje en busca de comentarios después del tuit de Musk. Pero, en un posteo previo dijo que toda la experiencia le había parecido “surrealista”. “Usted tenía todo el derecho de despedirme. ¡Pero habría estado bien que me informara!”, le replicó a Musk.
Thorleifsson, que vive en Islandia, ya no seguirá en la compañía: “Voy a abrir un restaurante en el centro de Reikiavik muy pronto”, tuiteó. “Lleva el nombre de mi mamá”.