El show de la artista en el Hipódromo del Parque Independencia generó quejas por la presencia de cuidacoches que pedían una tarifa fija, una situación que tuvo un episodio reciente previo cuando jugaron Talleres y Banfield en el Coloso
El recital de Tini Stoessel en Rosario volvió a poner en sobre la mesa la problemática vinculada a la presencia de cuidacoches en cada evento masivo que tiene lugar en la ciudad. El martes por la noche, muchas personas que fueron al show en el Hipódromo del Parque Independencia denunciaron que los “trapitos” cobraron una tarifa fija de mil pesos, pese a la presencia en la zona de agentes de Tránsito de la Municipalidad.
Una situación similar e incluso más caótica se vivió en el mismo parque el pasado 26 de octubre, cuando jugaron Banfield y Talleres por la Copa Argentina en el estadio de Newell’s.
En medio de una gran convocatoria de gente, hubo asados –con árboles y pasto quemados– en espacios verdes, gran cantidad de basura y cientos de vehículos multados por mal estacionamiento. Hinchas denunciaron que los ordenaron cuidadoches que les cobraron hasta 1.500 pesos.
Tras el recital de Tini, el diputado nacional de Juntos por el Cambio Gabriel Chumpitaz, que fue concejal de Rosario y presentó proyectos para regular la actividad de los cuidacoches, relató este miércoles en Radiópolis (Radio 2) que se vio “a las mafias organizadas de los trapitos haciendo de las suyas”.
El legislador rosarino había contado en su cuenta de Twitter que el martes por la noche estacionó en el club Gimnasia y Esgrima, en el Parque pero no específicamente en la zona del Hipódromo, y que también le cobraron mil pesos.
“Es muy llamativo lo que está sucediendo con ellos, como que nos estamos acostumbrando a esta práctica extorsiva», agregó.
El referente del Pro santafesino cuestionó el accionar del gobierno municipal y provincial para controlar la actividad de los cuidacoches: “Hay que actuar sobre ello. Hay que tener menos tibieza gubernamental, ir a denunciar a la Fiscalía. Hay que copar el territorio por parte del Estado, no de las mafias».