Este domingo 13 desde las 9 la Sociedad de Cardiología de Rosario organiza una jornada de concientización sobre cuidar el corazón. Será en Oroño y el río
La Sociedad de Cardiología de Rosario impulsa una jornada para concientizar a la comunidad sobre los cuidados que deben tenerse en cuenta para la prevención de enfermedades cardiovasculares. Entre otras cuestiones, lo imprescindible que resulta controlar regularmente el pulso, para que en el caso de advertir alteraciones, se pueda realizar la pertinente consulta médica. La actividad, impulsada por futuros médicos, residentes de cardiología y cardiólogos de la ciudad, se llevará a cabo este domingo 13 de noviembre desde las 9 en Oroño y el Río. El especialista Luis Keller (mat. 12150) es uno de ellos, quien además de convocar a los rosarinos a participar, profundizó sobre el tema y brindó recomendaciones.
Alimentación saludable para el corazón: qué comer y qué no
En principio, Keller destacó como aspecto primordial controlar el tamaño de las porciones y sostuvo que la cantidad es tan importante como la calidad de lo que se elige consumir. Sugirió incorporar más vegetales y verduras a la dieta . Así también, cereales integrales que son importantes fuentes de fibras y otros nutrientes que pueden ayudar a regular la presión arterial y la salud del corazón.
Por otro lado, recomendó limitar la ingesta de grasas no saludables, como las Trans; y optar por aceite de oliva, frutos secos, palta y margarina vegetal. Según explicó, es conveniente elegir proteínas con bajo contenido de grasa como lácteos descremados, pescados de mar y carne de ave sin piel y limitar el consumo de carnes rojas (comer las más magras).
Además, señaló como aspecto fundamental reducir el consumo de sal, limitando la sal de mesa y los alimentos con alto contenido de sodio.
Salud cardiovascular: actividad física, emociones y enemigos del corazón
El especialista señaló que el sedentarismo no es un factor de riesgo importante para desarrollar una enfermedad coronaria. Según indicó, se estima que en Argentina el 60% de la población es sedentaria.No obstante, recomendó realizar al menos 150 minutos por semana de una actividad aeróbica para reducir el riesgo de enfermedad coronaria o realizar al menos 10.000 pasos por día. Por otra parte, se refirió al impacto de las emociones. Se cree que las personas sensibles, altamente emocionales, tienen más riesgo de contraer enfermedades cardíacas. Al referirse a esta cuestión, el Dr. sostuvo que las personas que controlan bien sus emociones tienen mejor salud cardiovascular ya que el estrés a largo plazo aumenta el riesgo de enfermedad coronaria.
«Las personas con personalidad tipo A qué son más competitivos, impacientes y tensos como los de personalidad tipo D que tienden a experimentar más emociones negativas, son los dos tipos más relacionados con enfermedad cardiovascular», indicó.
Finalmente, consideró que la obesidad, por todos los trastornos metabólicos que conlleva, al igual que el tabaquismo, son enemigos de la salud cardiovascular. En este sentido, manifestó: «La obesidad está en aumento en el mundo y se incrementó con la pandemia, mientras que el tabaquismo en Argentina está disminuyendo en gran parte a las políticas públicas»
Hipertensión: un enemigo silencioso de la salud cardiovascular
Keller aseguró que la hipertensión arterial es un enemigo silencioso porque el 50% de los hipertensos desconocen que lo son. Se trata de una afección en la que la presión de la sangre hacia las paredes de la arteria es demasiado alta. Generalmente, se define como la presión arterial por encima de 140/90 y se considera grave cuando está por encima de 180/120 y, en algunos casos, no presenta síntomas. Según indicó, se estima que en Argentina el 33% de la población mayor de 19 años es hipertensa y se consume el doble de sal por día y por habitante de lo que aconseja la Organización mundial de la salud, «un fuerte factor de riesgo cuando no está tratada para que se produzca un infarto de miocardio», indicó.
Detectar las arritmias para consultar a tiempo
El cardiólogo explicó que las arritmias son alteraciones del «ritmo normal y natural» del corazón, las cual pueden manifestarse de diferentes maneras: el corazón late más rápido (taquicardia), más despacio (bradicardia) o en forma irregular (fibrilación auricular). En este sentido, detalló que los síntomas habituales pueden ser dolor de pecho, sudoración, falta de aire o mareos y vértigos. «Es importante la consulta rápida para recibir el tratamiento oportuno y evitar las complicaciones de la misma», recomendó. Asimismo, comentó que las personas que han sufrido un infarto o una arritmia y fueron diagnosticados, tratados correctamente, sometidos a todos los estudios pertinentes y luego incorporados a un plan de rehabilitación física pueden «desarrollar una vida relativamente normal, seguramente no a un nivel competitivo (en el caso de deportistas, por ejemplo), pero si recreativo», aclaró. Al concluir, remarcó la importancia de «implementar una alimentación saludable, realizar actividad física, mantenerse en un peso adecuado según la altura y edad, evitar el cigarrillo, el exceso de sal y hacerse los controles pertinentes» para preservar la salud del corazón y las arterias.