El pontífice pidió a los fieles que rezaran por las personas, especialmente jóvenes "que murieron la víspera en Seúl, la consecuencia trágica de la repentina estampida de la multitud".
El papa Francisco dedicó hoy su oración a las víctimas de la estampida en Seúl, la capital surcoreana, que dejó al menos 153 muertos durante una celebración de Halloween.
Después de su tradicional oración del Ángelus en la plaza de San Pedro del Vaticano, el pontífice pidió a los fieles que rezaran para las personas, especialmente jóvenes, «que murieron la víspera en Seúl, la consecuencia trágica de la repentina estampida de la multitud».
La cifra de muertos durante la estampida de miles de jóvenes que celebraban ayer Halloween en un barrio del centro de Seúl se elevó hoy a 153.
De acuerdo al último balance de víctimas del Ministerio del Interior a la agencia de noticias AFP, entre las víctimas hay 20 extranjeros.
Esa cartera indicó que la mayoría de los fallecidos eran mujeres jóvenes de unos 20 años, y precisó que 134 personas resultaron heridas