La referente del partido de ultraderecha Hermanos de Italia estará desde este sábado en el Gobierno junto al presidente Sergio Mattarella
La líder del partido de ultraderecha Hermanos de Italia Giorgia Meloni jurará mañana como la primera mujer premier de la historia del país tras aceptar hoy el encargo para formar un nuevo Gobierno que le hizo el presidente Sergio Mattarella y para el que logró armar un gabinete con representación de sus socios de coalición, pero con su sello personal en ministerios clave.
Meloni, de 45 años, jurará mañana a las 10 de Italia (las 5 en la Argentina), al frente de un Gobierno de coalición en el que también están las derechistas Liga de Matteo Salvini y Fuerza Italia de Silvio Berlusconi, anunció hoy el secretario general de la Presidencia, Ugo Zampetti, tras una reunión de una hora entre la líder ultraderechista y el demócratacristiano Mattarella.
Tras aceptar el encargo, Meloni dio a conocer esta tarde la lista de ministros que la acompañarán, con dos figuras fuertes como vicepremiers: el miembro de Fuerza Italia Antonio Tajani, que será también canciller, y el líder de la Liga, Salvini, que será además ministro de la Infraestructura.
Meloni anunció además a los técnicos Carlo Nordio en Justicia, una cartera para la que Berlusconi buscaba imponer a una persona propia, y Matteo Piantedosi en Interior, el destino que quería Salvini para volver a desarrollar la política antiinmigración que ejecutó en su paso por el ministerio entre 2018 y 2019. Piantedosi, de todos modos, fue el jefe de gabinete de Salvini y el líder de la Liga reconoció que firmaron juntos «todos los decretos» en la gestión.
La Liga, segunda fuerza más votada dentro de la coalición, tendrá de todos modos como ministro de Economía y Finanzas al actual titular de Desarrollo Económico Giancarlo Giorgetti, considerado el máximo exponente del ala moderada del partido.
El nuevo gabinete, de 24 ministerios, tendrá además como novedades una cartera dedicada a «Empresas y Made in Italy»; una para «Mar y Sur» y otra para «Familia, Natalidad e Igualdad de Oportunidades».
También se destaca la designación de la hasta la semana pasada presidenta del Senado Maria Elisabetta Alberti Casellati como ministra para las reformas institucionales, así como la incorporación del tema «Soberanía Alimentaria» dentro de la denominación de la cartera de Políticas Agrícolas.
El de Meloni, el Gobierno número 68 en la historia republicana italiana, será además el primero desde 2008 en tener como primera ministra a una persona votada directamente en las urnas y no elegida en base a acuerdos parlamentarios.
La líder ultraderechista llegará a la Presidencia del Consejo de Ministros de Italia tras una carrera de más de tres décadas que inició en formaciones posfascistas, continuó como ministra de Juventud de uno de los Gobiernos de su hoy socio Berlusconi y coronó el mes pasado al ser la dirigente más votada del país, con el 26% para la fuerza que creó hace solo una década.
Tras el anuncio de Meloni, Mattarella dio una breve declaración a la prensa en la que recordó que el nuevo Ejecutivo estará en el pleno de sus funciones «mañana a la mañana con el juramento» y destacó que «la claridad del éxito electoral» de la derecha en septiembre permitió la creación del nuevo Gobierno en tiempos veloces.
Durante la campaña, Meloni se definió como parte de una «derecha de Gobierno moderna y occidental», con un discurso que mezcla el rechazo a la inmigración con el apoyo parcial a un sistema de subsidios para personas desempleadas mientras defiende que el Estado tenga la «acción de oro» en empresas estratégicas.
Esta mañana, Meloni había encabezado la delegación de derecha y ultraderecha que se reunió con Mattarella para finalizar las «consultas políticas» que el mandatario dispuso desde ayer con todos los bloques parlamentarios para certificar que la alianza vencedora de las elecciones estuviera en condiciones de consolidar a una mayoría que la ratifique en el Congreso.
La creación del nuevo Gobierno se da en medio de los fuertes cruces de los últimos días entre Meloni y Berlusconi por la posición sobre la guerra en Ucrania, la conformación del Gabinete y fuertes críticas del cuatro veces premier al estilo de conducción de su aliada, al punto de considerarla «arrogante y prepotente».
La designación de Tajani, expresidente del Parlamento Europeo y considerado un defensor de la pertenencia a Europa y la OTAN es un gesto que entre otras cosas busca también balancear la cercanía de Berlusconi al presidente ruso Vladimir Putin.
Antes de la reunión con Mattarella, Berlusconi planteó de todos modos en redes sociales su convicción de «dar al país un Gobierno fuerte y cohesionado».
Decidida en los últimos meses a explicitar en cada una de sus intervenciones que no busca «rupturas con Europa» sino «potenciar la voz de Italia y sus ciudadanos», su estrategia tuvo a mediados de septiembre un contratiempo cuando sus eurodiputados y los de su socio Salvini defendieron al ultranacionalista húngaro Viktor Orban ante una declaración de las fuerzas de centro e izquierda del legislativo continental que consideraba que el país del Este ya no puede ser catalogado como una «democracia plena».
Tras el juramento de mañana, Meloni y su Gabinete tienen un plazo máximo de diez días para presentarse en el Parlamento a buscar el «voto de confianza» de la mitad más uno de cada una de las dos Cámaras del país, en las que de todos modos cuenta con mayoría clara.