Emplazado en Pettinari 6640, se fundó el 17 de octubre de 1933 y sigue ofreciendo diversas disciplinas de la mano de directivos que tienen fuertes lazos con la comunidad
Nueva Era Club cobró vida por el impulso de un grupo de 12 jóvenes cuyos nombres quedaron inmortalizados en una placa ubicada en el hall de ingreso de la institución. “Ese puñado de juveniles se empezó a congregar en calle Mendoza al 6400, entre Fraga y Cullen. Alquilaban un lugar para compartir un momento de relax y poco a poco todo fue creciendo”, dijo a modo de prólogo el actual presidente de la institución Raúl Travacio. Posteriormente hicieron base para no mudarse más en Pasaje Pettinari 6640, la emblemática cortada de barrio Belgrano desde la que el club, fundado el 17 de octubre de 1933, sigue brillando y continúa ofreciendo diversas disciplinas de mano de directivos que tienen fuertes lazos con la comunidad.
“En las primeras reuniones, ese puñado de pibes decidió armar una subcomisión de honor porque ellos no podían ser comisión directiva debido a que eran menores. Entonces buscaron a algunas personas mayores para que se hicieran cargo de la gestión. Lo lograron y duró hasta 1942, que es cuando los muchachos fueron mayores de edad y desde ahí sí pudieron ejercer como dirigentes”, enfatizó Travacio.
Con respecto al nombre de la institución, el presidente reveló el por qué. “Surgió de la espontaneidad. Cada uno tiraba una idea hasta que uno de los 12 fundadores expresó que ésta era una nueva era, por lo cual uno de los dirigentes propuso que debía llamarse así, y así fue que nació Nueva Era. Es más, tenemos los colores rojo, azul y rayas blancas como Inglaterra porque los fundadores tomaron esa referencia por la influencia del ferrocarril», explicó.
Travacio reveló además que “entre los fundadores de esta institución había dos tíos míos de apellido Ansaldi (Atilio y Juan)» y aseguró que «es un orgullo poder seguir ese legado”.
“Si bien Nueva Era comenzó a funcionar en Mendoza al 6400, lo cierto es que después se instaló acá, en la cortada Pettinari 6640. Eso fue posible porque se compró el lugar que era La Mansión de Marta Galli. Recuerdo que donde ahora está ubicada la pileta antes había una gran caballeriza. Se hicieron obras, pero se respetó la fachada original”, abundó Raúl.
Dirigente y amor por los colores
Raúl Travacio tiene 79 años y prácticamente toda una vida ligada a Nueva Era. “Me crié dentro de este club. Mi actividad dentro de la comisión directiva comenzó hace 56 años como tesorero, época en que hicimos la pileta de natación. De ahí en adelante siempre estuve ligado a este espacio ocupando diferentes cargos o simplemente acompañando desde afuera”, sañaló el dirigente.
“Desde los 23 años soy directivo. Pasé por casi todos los cargos. También pasamos por muchos coletazos, como de no poder pagar el cloro para la pileta, ir a Litoral Gas para hacer un plan de pagos o poner la tarjeta para abonar una cuenta. Y así varias cosas o problemas más”, comentó.
Travacio confesó que “antes de la pandemia nos quitaron el medidor de gas. A eso le agrego que gracias a un grupo de amigos, quienes nos bancaron con plata, pudimos pagar los sueldos siempre”.
“Las circunstancias de la vida me tienen hoy en día como presidente de la institución. Hemos quedado pocos, y todos somos mayores de edad. Si bien con Oscar Salvo estamos full time, hay un grupo de gente joven que está comprometida porque viene en sus tiempos libres, con todo lo que eso implica. En realidad, entre todos tratamos de aportar algo a este lugar, que es muy especial para nosotros”, puntualizó.
Raúl recordó que “el grupo de fundadores hacían bailes en una quinta de Fisherton e iban al club Mitre de Pérez a la pileta porque era la única que había en la zona», y agregó: «Pero un día un señor de apellido Pituelli, cuyo hermano luego fue presidente, que tenía una empresa de camiones, le hizo un préstamo especial a los directivos para que pudieran comprar este lugar. Y así comenzó todo”.
“Rápidamente Nueva Era empezó a figurar entre los clubes más famosos de la ciudad por la cantidad de gente que congregaba en los bailes de carnaval. Por acá pasaron números artísticos compuestos por los Cinco Latinos, Palito Ortega, Sandro, Alberto Castillo, Los Bombos Tehuelches, entre otros. También hubo show de números cómicos donde pasaron Porcel y Olmedo. El club supo brindar a la comunidad barrial grandísimos espectáculos”, exclamó.
Travacio remarcó que “el club pasó por varios momentos. Incluso en la época de la dictadura militar nos metieron una bomba, que era para la policía, y voló todo el escenario de material ”.
“Mi papá fue tesorero y secretario, así que yo venía todos los días al club. Jugaba al básquet y como me gustaba la locución, en los desfiles anunciaba las propagandas de bailes con 14 años. Además hice teatro acá, y a los 23 años fui tesorero por primera vez”, narró.
Raúl expresó además que “me fui enamorando del club con el paso del tiempo», y añadió: «Es como una relación con una mujer, donde te vas enamorando de chico como me pasó con mi esposa Estela Maris, que estamos juntos desde añares, y seguimos unidos”.
Pileta con aporte especial
El historial institucional marca que la idea de tener una pileta surgió porque todos los jóvenes de Nueva Era debían tomarse un tren en la estación barrio Vila para ir hasta el club Mitre. Es que la institución de Pérez era la única que contaba con un espejo de agua en toda la zona. No obstante, la dirigencia tricolor puso manos a la obra y comenzó a juntar fondos para contar con un natatorio.
“La pileta se hizo con el aporte de un grupo de socios que buscó adherentes para poder solventar los gastos. Es decir, salieron a buscar personas que pagaran una cuota individual de 5.000 pesos de aquella época a cambio de poder usar la pileta de por vida. O abonaban diez mil pesos por el grupo familiar, que les servía siempre al matrimonio y los chicos no pagaban más hasta los 18 años. Hubo muchas personas que se prendieron y se pudo construir este gran espejo de agua”, relató Travacio.
Fue entonces que el 26 de noviembre de 1966 se inauguró oficialmente la pileta, que una parte tiene 12.50 metros por 25, y la otra 12 metros por 9. Llenarla equivale a 800 mil litros de agua.
Pececitos destacados
Por otra parte, Nueva Era alberga a la Asociación Civil los Pececitos, integrada por deportistas con diversas discapacidades que practican múltiples disciplinas, entre ellas la natación. En ese marco, un grupo de diez deportistas se destacó días atrás en el Open de la Federación Argentina de Ciegos (Fadec), por lo cual lograron inscribir su nombre en el Parapanamericano Chile 2023.
Los grandes embajadores del club de zona oeste fueron Alan Nuñez, Misael Cancina, Bruno Murelli, Pablo Esci, Alejandro Costa, Lucas Colacra, Pablo Martinez, Franco Medina, Julian Mignoni y Daiana Paniagua.
Tesorero bien de la casa
Oscar Salvo es mucho más que un dirigente. “Desde los cinco años vengo al club. Me casé acá, acabo de cumplir 73 y soy tesorero desde hace una década, pero vengo integrando diferentes roles en la comisión directiva desde hace más de 25 años. Venía a nadar, hice gimnasia, tenis criollo, básquet, entre otros deportes. Todo este lugar forma parte de mi ADN”, mencionó el dirigente.
“Me casé en 1973. Mi familia viene al club. El legado sigue. Esto es parte de mi vida. Sin esto, no podría estar. Es mi vida”, cerró.
Múltiples propuestas
Nueva Era tiene un gran caudal de disciplinas. En una época había waterpolo, disciplina en la que logró varios campeonatos. Por otro lado, hace poquito el equipo de futsal fue a Formosa representando a Rosario para jugar la Copa de Honor.
“En la actualidad tenemos natación recreativa y federada. También taekwondo, donde el equipo fue campeón en varias categorías en Corrientes; patín artístico, gimnasia deportiva, telas, gimnasia para diversas edades”, detalló el presidente, y destacó: «Contamos con un gimnasio de musculación completo y ofrecemos tenis criollo. No tenemos básquet porque como que no está en la esencia del socio. También damos ajedrez”.
Entre los grandes deportistas que surgieron del club se encuentra la destacada ex jugadora de la selección argentina de vóley, Mirna Ansaldi.
Travacio describió que “1.200 personas pasan por mes. Tenemos 600 socios activos y 600 exclusivos de pileta», y amplió: «En tanto, más que proyecto tenemos hoy en día una necesidad: debemos cambiar la estructura de hierro de la pileta porque se fue deteriorando con el tiempo. Cada temporada vamos reemplazando piezas, pero lo ideal es reemplazar todo. También queremos poner luces led a la cancha de futsal”.