Una serie de mensajes de texto hizo poner el grito en el cielo a numerosos usuarios de Aguas Santafesinas. Es que varios ciudadanos comenzaron a quejarse en las redes sociales a causa de mensajes recibidos donde se les informa de que mantienen una deuda con la empresa y se los amenaza con un posible juicio y embargo, a pesar de deber pocos períodos.
«Advertimos inicio de juicio y traba de embargo por incumplimiento de pago de su deuda con Aguas Santafesinas». Así reza uno de los mensajes de texto que recibió un usuario de parte de un estudio jurídico de la ciudad. Aparentemente, este estudio se encarga de informar el estado de deuda mientras ofrece representación para evitar o solucionar esta instancia.
Otro de los mensajes del mismo estudio jurídico dice: «Evite embargo de domicilio por deuda con Aguas Santafesinas», para luego agregar información de contacto de la institución.
Extrañamente, estos mensajes a veces se reciben desde un teléfono con característica de Buenos Aires, cuando los números del estudio jurídico tienen prefijo de Rosario.
CLG dialogó con Guillermo Lanfranco, gerente de Comunicaciones de la empresa provincial, quien reconoció que el proceso judicial es una posibilidad: «El embargo es una instancia que tenemos como herramienta, como cualquier empresa de servicios».
Además, explicó de dónde provienen los mensajes: «Hay una posibilidad de que quien manda esos mensajes sea un gestor externo nuestro que se ocupa del cobro de deudas en los casos donde no tuvieron éxito todas las gestiones que hacemos nosotros como empresa».
«En general el embargo se usa cuando ninguna de las instancias anteriores tuvo éxito; antes invitamos a saldar una deuda por servicio, se ofrecen planes de pago de hasta 48 meses de financiación, hay muchas etapas previas antes de llegar a la demanda judicial», explicó Lanfranco.
Si bien desde Aguas explican que el embargo «generalmente se aplica cuando son deudas muy grandes, por ejemplo, cuando alguien no paga durante cuatro años», varios usuarios que recibieron estos mensajes alegan que tan solo deben dos o tres bimestres, algo muy lejano a cuatro años de deuda. Además, pese a que en la empresa aseguran que «los casos que terminaron con sentencias fueron usuarios no residenciales, como galpones», quienes recibieron estos mensajes son, en su mayoría, residentes en las propiedades.
Por otra parte, Oscar Barrionuevo, secretario general del Sindicato de Obras Sanitarias, dialogó en CLG y se mostró muy molesto con la situación: «Me parece demencial, está totalmente fuera de lugar». Y agregó: «Por la situación que se está viviendo, la actitud es repudiable».
Además, se refirió a la institución legal que envió los mensajes: «Aguas siempre tuvo estudios jurídicos que se encargan de los procesos judiciales, pero eso no significa que estos tipos hagan amenazas, sinceramente no creía que utilizaban este tipo de medios». Y agregó: «Se están excediendo con las formas, no tienen por qué amenazar. Nunca escuché de tipos que anden apretando a la sociedad, es muy feo».
Considerando el contexto social y económico en el que se encuentra el país, del que la provincia y la ciudad no están exentos, teniendo aumentos considerables de tarifas, un desempleo creciente y un poder adquisitivo cada vez menor, advertir con juicios y embargos supone una insensatez.