El lugar del ataque fue el camping Kumelén, en donde se encontraba el dueño del lugar, Pablo Conti, junto a su pareja
Dos encapuchados ingresaron con armas de fuego a un complejo turístico en el distrito rionegrino de El Bolsón, asaltaron al dueño del lugar y lo prendieron fuego, tras lo cual huyeron y dejaron un panfleto de la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM).
El lugar del ataque fue el camping Kumelén, en donde se encontraba el dueño del lugar, Pablo Conti, junto a su pareja.
Según publicó el sitio Noticias de El Bolsón, el violento episodio se produjo cerca de las 2 de este viernes, cuando los agresores ingresaron en plena madrugada al camping con armas y bidones de nafta. Al llegar al complejo, los delincuentes dispararon contra la vivienda de los cuidadores y luego lograron entrar a una de las cabañas rompiendo los vidrios de la ventana.
Allí estaba Pablo Conti, propietario del complejo, junto a su mujer. De acuerdo al medio local, los agresores amenazaron a la pareja con armas de fuego exigiéndoles dinero. Antes de retirarse, rociaron al hombre y a la cabaña con combustible y prendieron fuego el lugar. «Nunca dijeron más que `dame la plata´, `callate´, `te mato´», explicó Conti en diálogo con el medio local.
Después de robarles dinero en efectivo, los agresores rociaron al hombre con combustible y lo prendieron fuego. La víctima logró apagar las llamas pero quedó con el 20 por ciento de su cuerpo quemado y se encuentra internado.
Al escaparse, los delincuentes rompieron el vidrio de la camioneta y también incendiaron el vehículo. «A mí me quisieron matar, fue un intento de asesinato. Tiraron dos tiros, que los encontró la policía», agregó la víctima.
Los agresores dejaron un cartel, a pocos metros, adjudicando el ataque a la Resistencia Ancestral Mapuche (RAM) y reclamando la «libertad a los presos políticos mapuche», así como también se exigía «la unidad nacional en el weichan». «Contra el capitalismo winka, la industria turística que usurpa la Cordillera, fuera Lewis, Benetton, plantaciones de pinos, petroleras y mineras del territorio mapuche», añadía el documento.
«El papel apareció arriba, cerca de la ruta. Era como una bolsa con cuatro piedras para que no se vuele», aclaró Conti al sitio local. «Calculo que es para imponer miedo en la zona. No a mí porque no me conocen, no conozco a nadie en El Bolsón. Vivo acá hace un año y medio. No tengo ningún problema con ningún vecino», agregó la víctima del ataque.