Policiales

Detuvieron al principal sospechoso de balear al policía Gabriel Sanabria


El aprendido es un joven de 23 años que poseía dos pistolas semiautomáticas marca Bersa, una 9 mm y otra .380, 80 balas y alrededor de 200 mil pesos

La policía de Santa Fe detuvo al principal sospechoso de balear a Gabriel Sanabria, el uniformado agredido el pasado 27 de mayo en Arijon al 400 y que permanece internado en el Hospital de Emergencia Clemente Álvarez. El operativo se dio en el barrio La Cerámica, en la zona norte de la ciudad.

El atacante estaba identificado como Sebastián C., de 23 años, y fue detenido en un operativo a cargo de la Unidad Especial de Investigación de Crimen Organizado y la Tropa de Operaciones Especiales (TOE). realizado en Gallo al 1600, ordenado por la fiscal de Homicidios Gisela Paolicelli.

En el domicilio donde lo arrestaron, le secuestraron dos pistolas semiautomáticas marca Bersa, una 9 mm y otra .380. Además, le secuestraron 80 municiones de ambos calibres, alrededor de 200 mil pesos en efectivo, teléfonos celulares de diversas marcas y características y una mooto Honda Wave robada, con pedido de secuestro desde el martes.

Sebastián es el hijo de Mariana Soledad Meyer, la mujer imputada porque en su casa de Hungría y Ayacucho se incautó una mochila con cuatro armas de fuego: dos pistolas, una UZI tumbera y una ametralladora PAM.

El sospechoso había sido detenido el 9 de junio pasado en un procedimiento policial en Cafulcurá al 1400, en la zona norte, pero recuperó la libertad porque había sido aprehendido sin orden y sin haber cometido delito.

El ahora aprehendido había subido entre mayo y junio historias de Instagram donde mostraba alguna de las armas que poseía. Casualmente, en uno de los posteos exhibió una ametralladora PAM y una UZI tumbera, las mismas que fueron secuestradas tras la balacera que hirió gravemente a Sanabria en Arijón al 400 el pasado 27 de mayo.

El agente Gabriel Sanabria, de 26 años, fue baleado el 27 de mayo pasado cuando junto a un compañero de la Brigada Motorizada intentaron identificar a los ocupantes de un automóvil, cuya matrícula figuraba como un vehículo que había sido sustraído. Cuando el policía se acercó al coche, fue acribillado desde el interior y su cuerpo recibió entre 8 y 10 impactos.

El agente ingresó al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez (Heca) en estado crítico por las múltiples lesiones que sufrió y en forma lenta pero sostenida fue mejorando, a tal punto que, a pesar de seguir siendo un paciente en estado delicado, fue derivado a una sala general.