Por Diego Mussetta
Rosario volvió a demostrar que es una de las plazas más convocantes del país. Con unas 35.000 almas durante todo el fin de semana (25.000 este domingo), el Autódromo vivió una fiesta con el paso del Turismo Nacional, que dejó como saldo dos carreras ásperas, cambiantes y mucho chapa-chapa.
El plato fuerte de la jornada fue la Clase 3, donde se impuso Juan Pipkin con un Chevrolet Cruze, mientras que en la Clase 2 la victoria quedó en manos de Fernando Ayala con Renault Clio. Mientras que como telonera y dejando un gran espectáculo estuvo el Turismo Agrupado 1600 de las Categorías Agrupadas Federadas, donde celebró Esteban Flores con VW Gol.
Áspera. Y hasta pasando ciertos límites conductivos. Así fue la final de la Clase 3 del TN. La ganó Juan Pipkin, quien llegó con su Chevrolet Cruze al séptimo festejo en su historial en la divisional. Segundo quedó el oriundo de Bigand Iván Saturni y tercero Jonatan Castellano. Mientras que hubo cambios en el campeonato, pues ante el abandono del líder Mariano Werner, ahora el nuevo puntero es Leonel Pernía, quien arribó cuarto e hizo un gran negocio.
Un calco de lo ocurrido en la Clase 2 pasó en la Clase 3. Antonino García no largó bien y Pipkin, que partía segundo, le birló el primer puesto. Mientras que Saturni, ni lerdo ni perezoso, una vuelta después pasó a García y se adueñó del segundo lugar.
Con Pipkin, Saturni y Castellano adelante, había que mirar qué pasaba atrás. Y el abandono de Julián Santero provocó el primer ingreso del Auto de Seguridad, pues la pista en el sector de la curva dos se llenó de aceite.
Hubo reanudación, pero a los pocos metros de velocidad pura, nuevamente el Pace Car con las balizas puestas entró en escena, esta vez por el toque entre Pedro Gentile y Adrián Chiriano que terminó con éste último golpeando contra un muro de contención y debiendo ser retirado en ambulancia del Autódromo y trasladado por precaución al Sanatorio Laprida, aunque sin golpes de consideración.
El regreso a pista mostró toques, mucho chapa-chapa, maniobras ya fuera del límite permitido y dos de los protagonistas del sábado fuera de carrera por problemas mecánicos: Facundo Chapur (Citroën C4) y Tomás Urretavizcaya (Kia Cerato).
Ante esta situación, y en silencio, el que hizo gran negocio fue Leo Pernía, quien se apoderó del cuarto lugar que le dio puntos gordos para subirse en soledad a la cima del torneo.
Mientras, Pipkin aceleró y recibió antes que nadie la bandera a cuadros, coronando un fin de semana soñado en el Fangio.
Triunfazo chaqueño
La ganó en la largada. Primereó, saltó a la cima y no la dejó más. El chaqueño Fernando Ayala, con Renault Clio, se llevó la Clase 2 del Turismo Nacional ante una multitud en el Autódromo de Rosario.
En una final áspera, con varios ingresos del Auto de Seguridad, Ayala fue escoltado en el podio por Miguel Ciaurro (Gol Trend) y Esteban Cistola (Clio).
La clave estuvo en la largada. Allí Ayala sacó provecho de la mala salida de Nicolás Posco (Fiesta Kinetic) y pasó a liderar el pelotón.
El santafesino Ciaurro intentó vuelta tras vuelta acercarse y meterle presión a Ayala, pero el Clio del oriundo de Resistencia fue demoledor y se encaminó hacia una victoria justa y merecida.
Ayala se subió por segunda vez en su historia al escalón más alto del podio, donde fue escoltado por Ciaurro y Cistola. Luego arribaron Pastori, Posco, Iansa, Borgobello, Pérez, Lepphaille y Núñez.