Las cinchadas son una práctica ilegal en donde dos caballos son atados a dos carros contrapuestos y obligados a tirar
Una banda que organizaba apuestas ilegales en torno a cinchadas con caballos, que eran salvajemente torturados con picanas, palos y látigos con clavos.
Los operativos fueron realizados en el municipio bonaerense de San Miguel, donde se realizaban estas crueles prácticas que eran la base de un importante negocio clandestino.
La banda encargada de las cinchadas fue apodada por los investigadores como Los Salvajes, por el maltrato que le propiciaban a los animales.
Las cinchadas son una práctica ilegal en donde dos caballos son atados a dos carros contrapuestos y obligados a tirar: arriba de los carros, dos personas se encargan de torturar a los animales para que ganen la competencia y para ello utilizan picanas, látigos con clavos en la punta, fustazos y palos.
«Los caballos son encerrados a oscuras, drogados con anabólicos y otras atrocidades», señaló el Centro de Rescate y Rehabilitación Equino (CRRE).
Tras una denuncia anónima que derivó en tareas de inteligencia desarrolladas de la DDI de San Miguel, se realizaron varios allanamientos que permitieron desarticular la banda y salvar a nueve caballos que eran utilizados en estas salvajes prácticas.
También se secuestraron elementos de tortura, carros, aperos, picanas, drogas y medicamentos.
El CRRE quedó a cargo de los equinos rescatados y detalló que «si bien por fuera el estado general parecía bueno, tenían ulceras en la boca, dolor muscular, claudicación, la salud de los cascos era pésima y encima estaban muy mal herrados, generándoles deformación y atrofia». «La salud emocional de las víctimas también se vio afectada, ya que tienen rechazo y pánico al contacto humano», agregó la ONG.