El fuego interno contra Alberto Fernández no cesa. El ministro de seguridad bonaerense volvió a embestirlo con otra durísima crítica a su gestión y su particular llegada al poder
Ya como lo viene mostrando en sus últimas apariciones públicas, el ministro de Seguridad bonaerense Sergio Berni, ya no tiene filtro a la hora de criticar la gestión de Alberto Fernández. En esta última oportunidad, aprovechó una entrevista televisiva para disparar contra el presidente y también responsabilizó a Cristina Kirchner de haberlo elegido para el puesto y ser quien causó el presente del país.
«El que trajo al borracho que se lo lleve», deslizó el funcionario en una particular analogía con la fórmula gobernante y destacó que la vicepresidenta es «la única que tiene capacidad de conducción» dentro del espacio oficialista.
Con estas declaraciones, Berni dejó en claro que su vínculo con el jefe de Estado ya está acabado, aunque tampoco tiene la mejor relación con el otro sector de la interna. «Me fui del kirchnerismo antes de las elecciones. No hablo con ella desde ese entonces. Tengo respeto y admiración pero está conformación del Frente de Todos no me gusta, hicieron un merengue. Ellos dos tienen que arreglar este problema», recordó.
Esto no fue todo para el ministro de seguridad bonaerense porque se tomó un espacio para criticar y cuestionar directamente contra el mandatario. «El propio presidente dijo que no era peronista sino que es socialdemócrata. Este modelo está carente de doctrina peronista, hay que volver a lo básico. Me acuerdo cuando Cristina lo nombró a Alberto como candidato a presidente que sentí que se venía el Big Bang».
Berni es uno de los hombres más férreos del Gobierno de Axel Kicillof y de cara a las elecciones 2023 se desconoce que será de su futuro político. Para sorpresa de todos, el funcionario reconoció que está dispuesto a unirse a cualquier partido, incluso el de Mauricio Macri.
«Yo me siento en cualquier mesa en la que sepan a quien poner, no a quien sacar. Por más que sean peronistas o no. Yo creo que todos nosotros nos tenemos que despojar de las cuestiones personales ya sea Bullrich o Macri no tengo problemas», admitió el ministro, quien ya empezó con su campaña para el año entrante.