Aldo Ruffinengo habló con CLG sobre "Zanahorias", su última producción, y se refirió a su actividad cotidiana orientada al periodismo comunitario
Por Sofía Dalonse
El periodista y escritor rosarino Aldo Ruffinengo lanzó «Zanahorias», su cuarto libro de producción «autogestiva». Así lo definió el autor en diálogo con CLG: «Desde la primera letra hasta su publicación y también su distribución; desde el momento en que salió, me tuvo a mi como principal repartidor y entregador de ejemplares».
Ruffinengo es Licenciado en periodismo en la UNR y ejerce como docente del Postítulo en Periodismo. Desarrolla su tarea diaria en radio comunitaria FM La Hormiga, perteneciente a la Biblioteca «Pocho Lepratti», realizando el aire en algunos programas de la emisora y tareas de coordinación de contenidos de la radio.
La radio comunitaria pertenece a la biblioteca, la cual cumple 20 años de vida y funciona desde 2002 en barrio Tablada. Su casa originaria se encontraba en Virasoro 39 BIS y actualmente está ubicada en Chacabuco 3085.
Según comentó Ruffinengo, la radio comenzó como un taller de comunicación y funciona desde hace 10 años. Desde 2011, comenzó a integrarse al Foro argentino de radios comunitarias, el cual agrupa a todas las del país .
«El perfil del periodismo que hacemos tiene que ver con respetar las voces del barrio como concepto. La concepción de lo barrial, lo popular; esas voces que la comunicación hegemónica, que entiende solamente a la comunicación como un negocio, no da apertura a que voces en primera persona puedan narrar cuestiones del barrio», expresó.
En la misma línea, agregó: «En nuestro caso, nuestra búsqueda, es que sean las propias voces las que se cuentan a sí mismas, por eso hay pluralidad».
Asimismo, contó que realizan talleres de comunicación comunitaria y conexiones con escuelas para insertar la matriz de esta concepción de la comunicación en el aula.«Consideramos que la comunicación debe ser respetada como derecho humano y para ello debe ser horizontal, plural y respetar todas las voces y las diversidades», sostuvo.
Al referirse a su actividad como escritor, habló sobre sus producciones y aclaró que los libros «fueron resultado de distintas búsquedas».
«El mundo cada 30 minutos» fue el primero, una investigación periodística sobre las radios AM de la ciudad. El segundo, titulado «Arqueologías de los tiempos», es un ensayo sobre «nuestra identidad, raíces, costumbres, mitos, leyendas; una visión del continente», según detalló el autor. Mientras que el tercero, «El animador soy yo», es una biografía que relata la vida y trayectoria del conductor rosarino Alberto J Llorente.
Finalmente, se refirió a «Zanahorias», su última publicación, aunque la primera dedicada a cuentos y anticipó: «Es una reunión de distintos textos escritos en prepandemia, algunos terminados de resolver en pandemia, pero que en ninguna de sus condiciones lo expresa explícitamente. Habla de un mundo sin pandemia, con historias que se entrecruzan de distintas órbitas, lugares y situaciones, que conducen a mundos distintos».
Respecto a la distribución y entrega de los ejemplares expresó: «Al estilo de lo que hacen otros compañeros en la ciudad, como Kurt Lutman o Viviana Benito, nos hemos subido a esta manera de disfrutar no solo el momento de la escritura , sino también, vivenciar el encuentro con los lectores».
Y continuó: «Muchas veces a pie, encontrando un punto de encuentro en un bar o lugar público, o llegando a la puerta de una casa. En colectivo, auto o bicicleta».
Asimismo, comentó que hay varias librerías que «se han sumado amablemente a tener el libro exhibido» y mencionó casos como el de Homo sapiens, Paradoxa, rayuela, entre otras, que apuestan a apoyar este proyecto.
Además, «Zanahorias» se encuentra en bibliotecas (Argentina y Pocho Lepratti ) y «está en manos de Libreando libros, un joven que ya es un personaje conocido en la Rosario, que vende libros sobre un manto en el césped de la zona del río», cerró.