“Me gustaría pedirte disculpas públicamente, Chris. Me pasé de la raya y me equivoqué. Estoy avergonzado y mis acciones no fueron indicativas del hombre que quiero ser
“La violencia en todas sus formas es venenosa y destructiva. Mi comportamiento en los premios de la Academia de anoche fue inaceptable e inexcusable. Las bromas a mi costa forman parte del trabajo, pero una broma sobre el estado médico de Jada fue demasiado para mí y reaccioné emocionalmente”, escribió ayer Smith en su cuenta de Instagram.
Y añadió: “Me gustaría pedirte disculpas públicamente, Chris. Me pasé de la raya y me equivoqué. Estoy avergonzado y mis acciones no fueron indicativas del hombre que quiero ser. No hay lugar para la violencia en un mundo de amor y bondad”.
Acto seguido, el premiado actor también pidió perdón «la Academia, los productores del espectáculo, a todos los asistentes y a todos los que lo vieron en todo el mundo».
Finalmente, Smith lamentó que su comportamiento «haya manchado lo que ha sido un viaje magnífico para todos nosotros», en alusión a la labor realizada en la película «Rey Richard: Una familia ganadora», en la que interpreta al padre de las tenistas Venus y Serena Williams.
El actor ya había ofrecido sus explicaciones cuando subió a recibir su estatuilla aunque los ecos del incidente en medio de la ceremonia aún perduran y abren un interrogante sobre su futuro.
En tal sentido, la Academia de Hollywood emitió un comunicado en el que advirtió que «no aprueba la violencia de ninguna forma», lo cual alimentó rumores sobre la posibilidad de que le quiten la estatuilla a Smith.
El intérprete irrumpió en el escenario en medio de un monólogo del comediante Chris Rock, cuando hizo una broma sobre la alopecia que padece Jade Pinkett Smith, y lo propinó un cachetazo frente a toda la audiencia.