El alza interanual se vio empujada en febrero por la suba de los precios energéticos que generó la guerra en Ucrania, sumado a mayores costos del gasoil, alimentos y vivienda
La inflación en Estados Unidos no cede y sigue acercándose a máximos en décadas. En febrero, el IPC (Índice de Precios al Consumidor) interanual trepó al 7,9% y alcanzó un nuevo máximo desde enero de 1982 (8,26%), según reveló este jueves la oficina de Estadísticas Laborales estadounidense.
El alza mundial de los precios energéticos, que generó la guerra en Ucrania, sumado a los mayores costos del gasoil, alimentos y vivienda, explican la continuidad en la tendencia alcista de los precios en el país norteamericano.
La inflación escaló en febrero un 0,8% respecto a enero tras el aumento del 0,6% el mes previo. En tanto que el IPC subyacente, que excluye los precios de la energía y alimentos frescos, subió hasta un 6,4% interanual en febrero frente al 6% registrado en enero y al 5,9% que preveían los economistas. De esta manera, el alza mensual ha sido del 0,5% frente al 0,6% registrado en enero.
El conflicto bélico entre Rusia y Ucrania aparece como un nuevo factor a tener en cuenta para el comportamiento de los precios en las próximas semanas. Asimismo, ahora se espera con expectativa la reunión de la Reserva Federal, pautada para el 15 y el 16 de marzo, donde se definirá el aumento de tasas.