La gente tiene problemas para viajar en colectivos debido a la falta de puestos de recarga y el edil Carlos Cardozo propuso algunas soluciones transitorias
Fotos – Fernando Der Meguerditchian
Encontrar un punto fijo para recargar la tarjeta Movi y así poder viajar en el transporte público de Rosario es una misión imposible desde la llegada de la pandemia. Los puestos que estaban ubicados por la ciudad se cerraron desde esa fecha y de ahí en más se dificultó la recarga.
Carlos «Charly» Cardozo, concejal por Juntos por el Cambio, solicitó al Ejecutivo Municipal la reapertura de estos puestos, ya que en la ciudad diferentes comercios cuentan con postnet para las recargas, pero no suelen funcionar como debe ser o se quedan sin saldo rápidamente.
El edil dialogó con CLG acerca de esta problemática que afecta a los ciudadanos. Aseguró que hay 37 puestos que dejaron de funcionar desde el 20 de marzo de 2020.
«La idea es la reapertura de los puestos en puntos neurálgicos, el tema es que el Ente de la Movilidad no quieren volver a abrir las cabinas, ya que es un lugar muy incómodo para que trabajen personas con discapacidad», dijo Cardozo.
La propuesta es buscar lugares alternativos en vecinales, edificios públicos y, si es necesario, alquilar un local pequeño para que se pueda realizar este trámite.
Cardozo manifiesta que: «Hay puntos estratégicos donde la solución debe ser ya. Lo que nos dijeron es que están avanzando para que se abra uno fijo en Plaza Sarmiento. Toda la zona de Agote y la Terminal va a tener uno en el Mercado del Patio; en la Plaza Montenegro será otro punto. En los barrios, se está hablando con vecinales para que cedan un espacio».
Una de las preocupaciones inminentes es la llegada de las clases y que se volverá al pico de viajes y el problema no se solucionó. Lo que piden al municipio es que vayan abriendo a la brevedad estos puntos de recarga.
Le consultamos acerca de los problemas que tienen los comerciantes que realizan recargas y comentó: «Hay negocios que renuncian a realizar el servicio porque quedan expuestos a una situación de inseguridad, al manejar mucho dinero, pero que les deja poco margen de ganancia».