El acuerdo con el FMI, "ya no estaba tratándose de un tema exclusivamente económico sino que hay una consideración política, por eso decidimos interceder", manifestó
El vicepresidente del Parlasur, Oscar Laborde, aseguró este jueves que la negociación en torno al pago de la deuda externa argentina está tomando un tono «político», donde Juntos por el Cambio y el Fondo Monetario Internacional (FMI) tienen que «hacerse cargo» del préstamo, tal como indica la carta publicada por la agrupación Hermandad.
El acuerdo con el FMI, «ya no estaba tratándose de un tema exclusivamente económico sino que hay una consideración política, por eso decidimos interceder», explicó el argentino Laborde en una entrevista con Télam, respecto al texto publicado por Hermandad.
Diez expresidentes de América Latina, entre ellos Luiz Inácio «Lula» Da Silva, firmaron una carta pública en la que solicitan al FMI que «asuma la responsabilidad» por haber otorgado en 2018 «el crédito récord» de 45 mil millones de dólares al gobierno de Mauricio Macri «con el fin de beneficiarlo electoralmente y limitar a las próximas gestiones», en referencia al Frente de Todos.
Los firmantes reclamaron «la eliminación inmediata de los sobrecargos del préstamo» y que el FMI otorgue a la Argentina plazos que permitan «un crecimiento económico sin ajustes brutales ni restricciones fiscales» que sometan al empobrecimiento, según el documento al que accedió Télam en exclusiva y que firman Lula, el exjefe del gobierno de España José Luis Rodríguez Zapatero y los exmandatarios Fernando Lugo (Paraguay), Evo Morales (Bolivia), Ernesto Samper (Colombia), Dilma Rousseff (Brasil), Rafael Correa (Ecuador), Manuel Zelaya (Honduras) y Leonel Fernández (República Dominicana).
Laborde señaló a Télam que el objetivo de Hermandad era «darle un reclamo político, ya que ese es el tono que está tomando en este momento la discusión» por la deuda externa argentina.
«Nos parecía que había que subrayar que el origen de este problema tiene que ver con un préstamo desproporcionado, del 65% de la capacidad que tiene el Fondo para prestar. Se lo dio a un país en plazos de devolver absolutamente imposibles», apuntó Laborde, que además de conformar el directorio del Parlasur, coordina la agrupación Hermandad.
Y continuó: «El FMI tiene que hacerse cargo de este préstamo, porque toda la negociación tiene que ver con el pago pero sin ver quién es el responsable. Entonces, en ese sentido la carta marca que hay una responsabilidad grande del Fondo en cómo otorgó el crédito y tiene que hacerse cargo, y eso significa no ahogar a un país que está en plena recuperación económica».
Además, apuntó contra Juntos por el Cambio: «También tiene que ver con la oposición argentina, que está utilizando este préstamo opinando políticamente sin hacerse responsable».
«La oposición está alineada con un sector de Estados Unidos y un sector del FMI, porque ahora se pone muy rígida en hacer un acuerdo demasiado duro para Argentina y ellos mismos fueron los responsables de aquel préstamo impagable», aseveró Laborde.
Y detalló que «con el movimiento de la economía y el presupuesto» que tiene Argentina es «absolutamente imposible de pagar» en los términos que habían «firmado, acordado y festejado» desde la oposición, que ahora «ni siquiera participar en recibir información» sobre cómo está la negociación.
Respecto al impacto que podría generar la carta de Hermandad en la negociación con el Fondo, el vicepresidente del Parlasur afirmó que «va a ser considerada» de forma «positiva» para Argentina, ya que fue firmada por «10 ex presidentes, nueve de Latinoamérica y uno de España», y sumó las opiniones que dieron recientemente el Papa Francisco y el presidente de México, Andrés López Obrador.
«Que sepa que (el FMI) no solamente está polemizando con el Gobierno argentino sino también con todos estos sectores políticos, que muchos de ellos son y serán gobierno dentro de poco, como el caso de Lula», marcó.
Aseguró que «el objetivo de Argentina es ser un polo en un mundo multipolar» y para eso, «necesitamos movernos en conjunto», junto al resto de América Latina y «hay que vincularse con Estados Unidos y otros sectores de poder, como Rusia, China».
«Me da la impresión que es muy buena la recorrida que hace (el presidente argentino) Alberto Fernández por Rusia y China, porque va a constituir alternativas financieras, comerciales. Y de hecho la sola visita ya se entiende que es un apoyo en estas circunstancias», expresó.
Laborde celebró el panorama futuro para Latinoamérica, donde «hacia fines de 2022, de los 10 países de Latinoamérica, salvo Paraguay, Uruguay y Ecuador, no va a haber gobiernos neoliberales».
«En Colombia todo indica que no va a ganar el uribismo, en Brasil todo indica que va a ganar Lula. América Latina marcha hacia un agrupamiento de gobiernos que se preocupan por su pueblo», dijo.