Ocurrió un 22 de enero de 1942, cuando el equipo albiceleste que dirigía Guillermo Stábile superó holgadamente a Ecuador por 12-0 en el estadio Centenario de Montevideo
El seleccionado argentino de fútbol, acostumbrado a ser protagonista en la mayoría de las competencias que asumió a lo largo de la historia, concretó hace 80 años el máximo resultado a su favor, en un Campeonato Sudamericano.
Ocurrió un 22 de enero de 1942, cuando el equipo albiceleste que dirigía –por aquel entonces-el DT Guillermo Stábile (había sido el máximo goleador argentino en el Mundial 1930) superó holgadamente al representativo de Ecuador, por 12-0, en el estadio Centenario de Montevideo.
Eran tiempos en los que las distancias entre los grandes del continente (Uruguay, Argentina, Brasil) y el resto quedaban evidenciadas en la mayoría de los casos.
Enrique «Chueco» García (2m.), José Manuel Moreno (12m., 16m., 22m. y 32m.) y Adolfo Pedernera (25m.) anotaron en la primera etapa para edificar un provisorio 6-0 que auguraba chapa de escándalo.
En la segunda parte, los goles argentinos llegaron casi por decantación y fueron obra de Herminio Masantonio (9m., 20m., 23m. y 25m.), Angel Perucca (43m.) y el «Charro» Moreno (44m.) para decorar la docena de festejos.
La formación argentina contempló esa noche a Sebastián Gualco; Víctor Valussi y José Salomón; Gregorio Esperón, Perucca y José Ramos; Juan Heredia, Pedernera, Masantonio, Moreno y Enrique García.
Por su lado, Ecuador alistó a Napoleón Medina; Romualdo Ronquillo y Félix Leyton Zurita; Arturo Zambrano (Celso Torres), Luis Mendoza y Manuel Sempértegui; Marino Alcivar, Pedro Acevedo, Guillermo Gavilanez (José Herrera), José María Jiménez y Enrique Alvarez.
En ese campeonato Sudamericano, jugado en la capital uruguaya, Argentina arrancó su actuación con un ajustado triunfo sobre Paraguay (4-3), con los tantos de Raimundo Sandoval, Masantonio (2) y Perucca.
El equipo del DT Stábile hilvanó luego una convincente victoria ante Brasil (2-1), con las anotaciones de Enrique García y Masantonio, en un Centenario ocupado por más de 30 mil espectadores, según evocó el registro de Estadísticas de fútbol (RSSSF).
A posteriori del aplastante triunfo ante los ecuatorianos, el conjunto albiceleste sumó un cuarto éxito en hilera ante Perú (3-1), con los goles de Heredia y Moreno (2).
Más tarde, durante el último día de enero, se dio una curiosidad: en el cotejo disputado ante Chile, también en Montevideo, el seleccionado de la «Roja» se retiró de la cancha a los 43 minutos del primer período, molesto con el desempeño del árbitro peruano Enrique Cuenca. La organización le concedió el triunfo al combinado albiceleste (2-0).
Con cinco triunfos en igual cantidad de partidos, el último cotejo con Uruguay revestía características de final anticipada. Así ocurrió ese 7 de febrero.
El seleccionado local se impuso por 1-0 con gol de Bibiano Zapirain (St. 12m.) y se quedó con la corona del Sudamericano.
El segundo triunfo más amplio del seleccionado argentino en su historia se dio casi treinta y tres años después. En cancha de Rosario Central, un equipo dirigido por César Luis Menotti, compuesto mayoritariamente por jugadores que actuaban en los denominados «equipos del Interior», vapuleó a Venezuela, por 11-0, en un encuentro de fase clasificatoria de Copa América 1975 (que luego ganaría Perú).
La alineación argentina nucleó esa tarde a Hugo Orlando Gatti (Unión de Santa Fe); Andrés Rebottaro (Newell’s), José Luis Pavoni (Newell’s), Daniel Killer (Rosario Central) y Mario Killer (Rosario Central); Osvaldo Ardiles (Huracán), Américo Gallego (Newell’s) y Mario Zanabria (Newell’s); Ramón Bóveda (Rosario Central), Leopoldo Luque (Unión) y Mario Kempes (Rosario Central). Luego ingresaron Julio Asad (Vélez Sarsfield) y Daniel Valencia (Talleres de Córdoba).
Los goles fueron anotados por Daniel Killer (3), Gallego, Ardiles, Kempes (2), Zanabria (2), Bóveda y Luque.