CLG dialogó con Marina Aloe, cocreadora de Arte y Barrio Los Pescadores, un proyecto de dos muralistas que tiene como objetivo "visualizar las problemáticas del barrio"
El barrio rosarino Los Pescadores sufrió, durante las últimas décadas, un gran deterioro en su infraestructura. Ubicado en cercanías de La Florida, la zona cuenta con una gran historia en la ciudad. Con La Gente dialogó con Marina Aloe, cocreadora junto a Aymará Sosa de Arte y Barrio Los Pescadores, un proyecto que surgió en 2020 entre las dos muralistas y tiene como objetivo “visualizar las problemáticas del barrio”.
Aloe y Sosa estuvieron en contacto con el barrio de diferentes maneras. En el primer caso, Marina hace cuatro años que había dado un taller de apoyo escolar y vivió arriba del barrio toda su vida. “Siempre lo tuve muy presente”, confesó. En el caso de Aymará, fue contratada para realizar unos trabajos artísticos y con el tiempo lo pudo conocer más de cerca.
Asimismo, las artistas forman parte de Ammura, una agrupación nacional de mujeres muralistas. “Nos conocimos ahí y armamos este proyecto para visualizar la problemática del barrio y su situación actual”, explicó Aloe.
“Nosotras trabajamos muy cómodas entre las dos. Pero tenemos un ritmo seguido de visitas al barrio y de acercamiento a la gente para pensar en los proyectos que podemos realizar. Luego definimos las ideas en conjunto con los vecinos y ahí hacemos la convocatoria para que artistas y los que quieran colaborar se sumen a pintar”, comentó.
La primera intervención artística que realizaron en el barrio fue la de pintar todos los frentes de las casas. “Pudimos conseguir los permisos rápidamente porque son propiedades privadas y hablamos directamente con cada propietario. Esto sirvió para impactar visualmente en la imagen del barrio. Luego, decidimos pintar la escalera porque era un lugar que estaba muy venido a menos y con décadas de nulo mantenimiento”, detalló la muralista.
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Por otro lado, Marina explicó que “los vecinos están de acuerdo con las intervenciones y nos ayudan a difundirlas. Hacemos rifas, se realizan donaciones de comida y recibimos ayuda municipal y provincial para conseguir recursos. También el sector privado, como pinturerías y auspiciantes, colaboran con materiales”.
Lo particular del arte es que, por lo general, no molesta y genera mucho impacto y transformación.
“El hecho de pintar, más allá de lo estético, tiene como objetivo general un reconocimiento del barrio. Por eso en las intervenciones buscamos de sumar mucha gente y provocar un movimiento de difusión importante para el barrio”, concluyó la artista.
Y cerró: ”Queremos que la gente vaya al barrio Los Pescadores, se den una vuelta cuando quieran pasear y recorran esta hermosa comunidad que es típica en la región de El Litoral y forma parte de la historia de Rosario”.