Jorge VItantonio, presidente del Centro de Panaderos de Rosario, que forma parte de Faipa, habló con CLG y contó de qué se trata de esta propuesta que presentaron ante la Secretaría de Comercio Interior
Sobre el final de la primera quincena de enero, la Federación Argentina de la Industria del Pan y Afines (Faipa) presentó un escrito ante la Secretaría de Comercio Interior que conduce Roberto Feletti ofreciéndose para iniciar un diálogo entre todos los actores que forman parte de la elaboración del pan. «La actual gestión entiende que es importante que Faipa forme parte del programa precios cuidados, ya que el pan es un producto esencial en el consumo», marcó en la carta al funcionario. En este contexto, CLG habló con Jorge Vitantonio, presidente del Centro de Panaderos de Rosario, que forma parte de Faipa.
El referente del sector explicó que «se trata de hacer una mesa del pan donde estén los molineros, los cerealeros y los panaderos» y agregó que cuando llegan los aumentos a los elaboradores «lo trasladamos al costo, por lo que no somos los formadores de precios».
En esta línea, planteó que para «lograr un precio razonable» todos los actores deben mantener un diálogo «para que no aumenten la harina de un día para otro y que el cereal no valga más de lo que tenga que valer».
«A lo largo y a lo ancho del país el panadero está dispuesto a fabricar un pan a precio saludable, porque es un alimento fundamental para la mesa del argentino», aseguró el presidente del Centro de Panaderos de Rosario y aseguró que «históricamente el dialogo con los gobiernos son buenos porque uno dice lo que piensa y ellos lo saben».
En sus palabras Vitantonio se metió de lleno en el mercado y aseguró que ante «la desnaturalización de los precios, los panaderos no seguimos en esa tónica» porque «queremos seguir trabajando, mantener nuestras pequeñas pymes y vender a un precio razonable para pagar todo lo que tenemos que pagar».
El panadero ubicó el promedio del kilo de pan francés en 180 pesos e indicó que el estudio que realizaron desde el Centro de Panadero del 2021 detalló que el producto aumentó un 28%. «Estuvimos muy por debajo de la inflación porque necesitamos vender», afirmó.
En este sentido, contó que a fines de noviembre se dio el último aumento y que el pan seguirá en ese precio hasta los ajustes que se deberán hacer por aumento salariales a los trabajadores. «Seguramente en febrero haya otro aumento, pero será lo justo y necesario», aseguró Vitantonio.
Las preocupaciones de los panaderos artesanales pasan por dos temas: los aumentos en los insumos, «principalmente los monopólicos como la levadura o la harina», sentenció el hombre, y agregó «el otro es que tenemos más de un 50% de clandestinidad en nuestra industria y eso nadie lo combate».
«Ante esa situación tenemos que disminuir nuestra rentabilidad tenemos que bajar los precios para seguir pagando los salarios e impuestos», añadió con desazón.
En está línea contó que ante las fiestas que pasaron el pan dulce solo aumentó un 30%. «Lo teníamos a 850 pesos en 2020 y ahora lo llevamos a 1.100», manifestó el referente del sector y explicó que esto se debe a que «hay tanta oferta de pan dulce de muy baja calidad y barato, y nuestro productos son de calidad, pero no podemos subir tanto porque tenemos que vender».
El 2021 para los panaderos «fue durísimo» según detalló Vitantonio, de todas formas en «volúmenes de venta se mejoró con respecto al 2020 un 10 o 15%» y para este año que comenzó aseveró que desde el sector «vamos a poner todo para llevar un precio razonable» a las calles rosarinas.
