El gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, se refirió este lunes a la realidad económica y política que está atravesando la Argentina y, sin hacer demasiado énfasis en las críticas directas hacia la administración nacional, lamentó el impacto de la crisis en algunos sectores, sobre todo en los más vulnerables.
“La inflación golpea en los bolsillos de los trabajadores y al mismo tiempo genera retracción en la economía y un achicamiento de la inversión pública. Todo esto es un combo de acto impacto social, que repercute fundamentalmente en los sectores más vulnerables”, señaló el gobernador en declaraciones formuladas a Radio 2.
Al mismo tiempo, adelantó que el gobierno de Santa Fe va a estar “presente, a acompañar y estar atento”. “Este es un momento para mantener la calma”, instó Lifschitz, y aseguró que hay que abrirse más al diálogo con todos los sectores.
“Debemos saber contener la calma y priorizar las cosas importantes”, concluyó el gobernador.