El área de Laboule 12, desde donde los periodistas informaban, es objeto de intensos enfrentamientos entre bandas armadas que intentan tomar el control de la zona
Dos periodistas haitianos fueron asesinados el jueves por la noche por una pandilla de la periferia de la capital Puerto Príncipe mientras realizaban una nota sobre la inseguridad imperante en el país, episodio que fue duramente repudiado y condenado este viernes por la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
La información fue difundida por la la emisora radial que empleaba a las víctimas, cuyos cadáveres fueron recuperados este viernes por la policía. Wilguens Louissaint y Amady John Wesley resultaron muertos en un tiroteo y un tercer periodista que los acompañaba logró escapar, dijo a la agencia de noticias AFP la emisora Radio Ecoute FM.
Los homicidios ocurrieron cuando las bandas criminales han ampliado su alcance más allá de los barrios marginales de Puerto Príncipe. El área de Laboule 12, desde donde los tres periodistas informaban, es objeto de intensos enfrentamientos entre bandas armadas que intentan tomar el control de la zona.
Una ruta que atraviesa el área es la única alternativa para llegar a la mitad sur del país, además de la ruta principal, controlada desde junio por una de las pandillas más poderosas del país. Pero la violencia no se limita a las calles.
Hace seis meses el presidente Jovenel Moise fue asesinado en su residencia privada de la capital, un magnicidio que sumió a Haití en una crisis política aún más profunda y empeoró la situación de seguridad que sus habitantes deben afrontar a diario.
El país, uno de los más pobres e inseguros del mundo, registró al menos 950 secuestros en 2021, según el Centro para Análisis e Investigación de los Derechos Humanos.
Menos equipada y enfrentando a grupos criminales que poseen fuertes arsenales, la Policía de Haití no ha intentado organizar ningún operativo a gran escala contra las pandillas desde marzo de 2021.
La impunidad de las pandillas muestra, además, las debilidades del sistema de justicia penal de Haití, donde las investigaciones rara vez tienen éxito.
Por caso, el asesinato en abril de 2000 del periodista Jean Dominique, el reportero más famoso de la isla en ese momento, sigue sin resolverse. Tampoco se completaron las investigaciones sobre los asesinatos de otros dos periodistas ocurridos en junio y octubre de 2019.
La Sociedad Interamericana de Prensa calificó de «brutal asesinato» los hechos e indicó en un comunicado que ponen en marcha la cuenta macabra de periodistas asesinados en la región en 2022.
Por su parte, la ONU condenó enérgicamente el hecho y urgió a las autoridades a hacer todo lo posible para encontrar a los autores y llevarlos ante la Justicia. El vocero del titular del organismo, Stéphane Dujarric, expresó que «a veces uno se queda sin palabras» cuando se le pidió que comentara el asesinato, según la agencia de noticias Sputnik.