Fue en el marco de múltiples allanamientos en los que se detuvieron a otras cinco personas y se secuestró cocaína, marihuana, dinero, municiones, motos y celulares
Dos policías de la comisaría 32ª fueron detenidos en las últimas horas por estar acusados de aceptar una coima de 50 mil pesos por parte de la familia de Brandon Bay, líder de una organización narcocriminal de Rosario. Un tercer efectivo involucrado fue hallado en Ceres y anunció que se entregará a las autoridades.
Las aprehensiones se produjeron tras una serie de allanamientos relizados en la zona sur de Rosario por orden del fiscal provincial Pablo Socca, en los que también fueron detenidos cinco integrantes de la banda narco conocida como «Los Gorditos». Se secuestraron más de dos kilos de cocaína, marihuana, un millón de pesos, municiones de distintos calibres, motos y celulares.
Los operativos se hicieron por parte. Por un lado, la sección Inteligencia de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) realizó los allanamientos en los domicilios de la banda; y la Agencia de Control Policial se encargó de los procedimientos en las casas de los uniformados bajo investigación. En tanto, la Brigada de NN de la delegación de Tribunales se ocupó de hacer las intervenciones telefónicas.
Durante los allanamientos se detuvo a la madre del líder Brandon Bay, Érica A., y a sus hermanas Flavia y Giuliana. Los otros arrestados son Jorge N., Ricardo A., y Mabel A. Hay al menos tres prófugos en la causa.
En el caso de Flavia Bay, ya estaba tras las rejas, pero ahora se le ampliará la imputación en su contra.
Brandon Bay actualmente se encuentra detenido en el penal federal de Marcos Paz, pero para el fiscal Pablo Socca sigue activo, dando órdenes a su banda a través de familiares.
En los domicilios se incautaron dos kilos de cocaína con el sello de una corona; dos ladrillos de marihuana; 952 mil pesos; dos balanzas de precisión digital; elementos para fraccionamiento y estiramiento de droga; tres motos; 21 celulares; 103 municiones calibre 9 milímetros; 80 municiones calibre 22; 70 cartuchos de escopeta claibre 12/70.
En la investigación, el fiscal del equipo de balaceras Pablo Socca detectó que tres policías de la comisaría 32ª participaron en la liberación de dos miembros de la organización criminal a cambio de una coima de 50 mil pesos. El hecho ocurrió en septiembre, e involucró a los uniformados Axel T. y Magalí C. Está prófugo un uniformado identificado como Hugo Orlando F.
Los nueve detenidos serán llevados a audiencia imputativa. Los seis miembros de la banda por asociación ilícita, mientras que a los policías se les atribuirá el delito de cohecho.