El gobierno japonés convocó este miércoles a varios grandes grupos, incluidos los gigantes Boeing y Airbus, para discutir sobre el desarrollo de automóviles voladores.
Sin embargo, los proyectos presentados en esta reunión a iniciativa del ministerio de Economía, Comercio e Industria (METI) nipón demuestran que este sueño no es algo de hoy para mañana.
La iniciativa japonesa, que aún sigue siendo algo vaga, apunta a diseñar una hoja de ruta antes de fin de este año. Los potenciales participantes en el proyecto provienen del sector aeronáutico (Airbus, Boeing, ANA y Japan Airlines), del automóvil (Uber, Subaru), o de la tecnología como NEC.
Los automóviles voladores «podrían resolver problemas de transporte en regiones aisladas o montañosas, o en el marco de operaciones de rescate en casos de desastre», dijo Shinji Tokumasu, funcionario del METI.
«Organizamos esta reunión pública y privada para hacer prosperar una nueva industria, y que sea rentable», señaló.
Entre los proyectos presentados este miércoles, la empresa Cartivator está preparando un vuelo de prueba de su vehículo futurista pilotado «SkyDrive», para 2019.
Uno de los objetivos de este grupo de jóvenes ingenieros, apoyados financieramente por el megaconstructor automovilístico Toyota, es lograr (con uno de estos ingenios) encender la llama de los Juegos Olímpicos de Tokio-2020. Y, a más largo plazo, aspiran a poder construir su vehículo en serie en 2027.
Decenas de empresas de todo el mundo, incluidas muchas start- ups, están trabajando en ingenios híbridos capaces de rodar por las carreteras y en cualquier momento elevarse por los aires.
En cuanto a las grandes marcas, la empresa Uber, con su iniciativa «Elevate» aspira a desatascar el transporte urbano, y Airbus, cuyo vehículo «Vahana» ya realizó su primer vuelo en febrero, está muy activo en este tema. Por su parte, el grupo industrial británico Rolls-Royce también presentó un proyecto propio en julio.
El «Flyer» diseñado por la start-up Kitty Hawk, y financiado por el cofundador de Google, Larry Page, ya recibe comandos a confirmar desde junio. «Flyer» evoca el nombre del primer avión que vóló en la historía en 1903, y Kitty Hawk, la zona costera de Estados Unidos donde ello ocurrió.